La última casa en la montaña

Max y Poncho se ven involucrados en un accidente que da un giro total a sus vidas, uno de ellos es que deben mudarse a otro pueblo con su tía a una tenebrosa casa solitaria en la montaña.

🏚 Para comenzar, creo importante mencionar que este no es un libro para niños pues eso es lo que yo pensé al ver la portada y la sinopsis, más bien lo colocaría en la categoría de terror psicológico.

🏚 Tiene un personaje secundario frío, esquizoide, manipulador y fanático religioso que lleva a cabo acciones impensables contra Max y Poncho, tanto así que llegue a maldecir a ese personaje varias veces durante mi lectura. 😅

🏚 La novela me gustó, pero creo que el autor nos quedó debiendo un poco en cuanto al tema de algunos seres paranormales que hay en la novela pues al final no se desarrolla la historia alrededor de ellos, razón por la cual me gustaría leer Lobos (novela consecuente a ésta).

La última novela de Xavier M. Sotelo está llena de contrastes, de dualidades, de historias paralelas que se complementan y alejan a lo largo de la narración. Historias llenas de ambigüedad en donde los personajes pueden presentar dos caras. Tanto a nivel físico, como se puede disfrutar de lo lindo su anterior novela y que tan ligada está a esta que nos ocupa, como en lo psicológico en la que el comportamiento de los personajes puede resultar impredecible. Toda esa dualidad se puede extender también a las sensaciones que experimentas como lector a lo largo de las tramas que nos presenta Xavier. Hay momentos en que lo adoras y otros en los que tienes una certera necesidad de desgarrarle la garganta.
Aquí nos presenta dos historias que corren paralelas y que se encuentran relacionadas entre sí por un suceso trágico que ensambla ambas tramas y que, además, sirve como nexo indiscutible con su anterior novela Lobos. No es necesario conocer de antemano esta última, aunque si te ayuda a condicionar tu cabeza para lo que prevés que pueda ocurrir en cualquier momento. Mientras avanzas en la narración sabes que te encuentras en parajes hostiles, que no deberías descuidar los avisos que te ofrecen y llegas a un punto en el que quieres gritarle a los personajes que por favor te hagan caso y no sigan por ese camino. Pero claro, eso solo te funciona en las novelas convencionales.
Aquí al autor le da igual lo que esperas como lector y es consciente de que lo que tienes entre manos no es precisamente una novela romántica. de ahí que desde el comienzo de la trama ves como no le tiembla el pulso en poner toda la carne en el asador y avisarte de lo que está a punto de empezar.
Y así entras de lleno en esta historia. O en las historias porque en realidad estas leyendo dos tramas que, aunque relacionadas, van cada uno por su lado. En una de ellas, ves como unos pequeños tienen que irse a vivir a la casa de una tía lejana con una estricta forma de vida mientras que en la otra te enfrentas a las investigaciones del jefe de la policía a una desgracia personal.
Desde mi punto de vista ese es el mayor problema de la novela. Ambas tramas podrían funcionar perfectamente de manera independiente y, al estar divididas, van restando fuerza una a la otra. En mi caso, todo lo concerniente a Esteban Rey me parece fascinante, mostrándote una cara aterradora de un país donde el terror real está fuertemente ligado con lo sobrenatural. Cada uno de los momentos con los que tiene que lidiar el jefe de policía y el destino al que va a ser incapaz de enfrentarse es desolador.
Sin embargo, la novela se llama La última casa en la montaña y toda la trama que debería ser principal aquí queda lastrada por esa otra. Ojo, eso no quiere decir que no te vayas a encontrar aquí con un terror incómodo, visceral, claustrofóbico y que, sin lugar a dudas es el centro de toda esta novela. La tía Carmen y los niños dominan la narración, te aterran, te harán sufrir con su forma de entender la vida y con su ambiguo raciocinio. El autor no escatima en mostrarte momentos que se te quedarán grabados en la cabeza y que en más de una ocasión te harán maldecirle. Siempre he considerado que para que una novela dé auténtico terror debe ser necesaria la sensación de que realmente te estas enfrentando a un peligro y aquí lo estas percibiendo en todo momento. Pero en mi caso toda esta parte, fundamental en la historia, no terminó de enamorarme. Aún así, es terrorífico lo que viven esos críos, pequeños inocentes incapaces de asimilar lo que ocurre a su alrededor.
Por lo demás, una trama adictiva como pocas (las doscientas cincuenta páginas cayeron en un mismo día) con momentos salvajes, apariciones, aullidos, sombras, miradas y silencios, crucifijos, tormentos, secretos, premoniciones, cadáveres, desmembramientos, lugares conocidos, muerte y toda una colección de horrores que hacen de esta novela todo un divertimento, de esos de los que te hacen sufrir.

En esta lectura nos encontramos con un cuento oscuro. Tras un fatal accidente automovilístico dos niños, de nueve y cinco años, pierden a sus padres. A la espera de que algún familiar se ponga en contacto con Esteban Rey, oficial de policía del municipio de Tapalpa, como familia más cercana se encuentra la tía Carmen, una mujer con un carácter especial. de trato escueto, seria, estricta y con un fuerte fervor religioso es la dueña de una vieja hacienda en la que los dos niños se disponen a vivir.

Finalizando de leer esta novela me dí cuenta que la historia venía de otra novela anterior: 'Lobos'. Aunque se puede leer independiente, recomiendo leer la primera. El personaje de Esteban Rey viene del anterior libro y por cómo ha finalizado deduzco que continuará. Cuando tenga un respiro intentaré leer la primera novela.



Es una novela sencilla, no lo voy a negar, pero aún así es una historia envolvente y bien pensada. Cuando las historias cuyos protagonistas son niños el horror se vuelve más intenso y terrible. El terror psicológico y la expectación que crea una vieja casa aislada en las montañas a la que se accede por un carretera sinuosa y habitada por una señora que no sabemos de que pie cojea hace que la incertidumbre sea mayor. Podría decir que 'La última casa en la montaña' es una mancha oscura. Terriblemente oscura.

Ya el título me sedujo. (Maldita obsesión por los títulos y las portadas). Y luego hubo escenas que me recordaban a una peli de terror, de esas que tanta ansiedad me causan. No miedo, no os equivoquéis, pero sí un cierto desasosiego.

Como el autor es mexicano ha introducido elementos de las costumbres populares de su país, como el ritual de muerte en México, que encajan tan bien en este tipo de novelas. También ha introducido otros elementos como los 'fantasmas' que aparecen en la vieja hacienda y dan un toque paranormal a la historia. Mi gusto por lo sobrenatural me lleva a leer novelas en las que aparecen este tipo de componentes y es que la realidad está sobrevalorada. ¿no creeis?

Pronto llega el final y si tuviera que decir algo negativo de este libro es que al quedar incompleta y abierta una de las tramas me he quedado con ganas de saber más.

¿Se podría mejorar esta historia? Sí, como todas, pero creo que no me olvidaré de Max y Poncho tan fácilmente, además tengo el presentimiento que con la tercera parte el autor se superará. Llámalo intuición.
Enlace: https://www.yoleonovela.com/..

Wow! Por segunda ocasión Xavier Sotelo lo hizo y logró que sintiera el terror de enfrentarme a la tía Carmen o una vez más a los lobos de El Real.

Me gusto bastante, si me llego a causar miedo en algunas partes, pero mas que miedo, fue el sentimiento de coraje e impotencia de no poder sacar a este personaje del lugar tan feo en el que se encontraba, y lo malo que la gente no se daba cuenta de la situación de abuso que estaba sufriendo.
Considero que es importante leerlo para llegar a entender algunas situaciones y conocer algunos personajes de los otros dos libros.

Un libro que no tiene tantas páginas pero que me costó terminarlo, la razón: la tía Carmen, un personaje que es imposible que no lo odies, que no te cause un revoltijo de tripas y te haga subir la bilis de la bronca que te produce. No hay muchos personajes que llegue a odiar tanto (La señora Carmody de la niebla de King es un poroto al lado de la Tía Carmen). Realmente el autor supo crear un personaje que afecte al lector y eso hace que el libro gane muchos puntos y además de que seguro seguiré a este autor porque me a conquistado.
Tenemos por un lado a un policía cuyo hermano es responsable de un accidente que afecta la vida de dos pequeños. A partir de que los niños terminan al cuidado de su tía Carmen las cosas Irán de mal en peor a tal punto que te quieres meter dentro de las páginas del libro y hacer justicia por mano propia. Paralelamente, iremos conociendo la vida del policía y su hermano y un misterio que parece ser un enigma complicado.
Sin lugar a dudas un libro que vale la pena leer.

Cautivante. Caótico. Aterrador.

Desde que comencé mi aventura de leer más autores mexicanos Xavier M. Sotelo fue de mis primeros intereses, aunque conseguir alguno de sus libros no fue fácil.

La espera ha valido la pena, sin duda alguna. Empezando con la tragedia, un terrible accidente automovilístico no solo a dejado huérfanos a los hermanos Alfonso y Maximiliano, también les deja frente a la puerta de la Tía Carmen.

Como hablar de la tía Carmen sin perder la calma, he amado tanto su personaje de la misma forma en que desee tenerla enfrente para abofetearla. Tanto fanatismo religioso concentrado en maldad, todos esos actos crueles que solo ella podía justificar. Oh tía Carmen.

Es curioso como dos niños pueden conservar su inocencia a pesar de todo el peligro que los rodea.

Si este libro es tan solo una precuela, no sé cómo podré conservar la cordura hasta leer Lobos, que alguien se apiade de mí alma y me ayude a conseguirlo.

Me ha parecido una historia de lo más interesante, entretenida y bien hecha. La premisa es intrigante y atrayente.

El libro está dividido por las estaciones del año, con una introducción y un epílogo.

Algunas de las cosas que ha llamado mi atención es que el autor incluye canciones de fondo en varias de sus escenas. También debo reconocer la habilidad del autor para las escenas de acción que me parecen bien logradas. Inclusive en un aparte me llené de miedo tan solo de creer que los personajes serían descubiertos, así que cuando un autor logra generarme emociones, son puntos a su favor.

El libro se lee rápido, solo que, para mí, llegó un momento en que eran demasiadas preguntas y nada de respuestas. Eso me frustró un poco, pero bueno, siendo paciente todo resulta bien.

Creo que la historia que contó el autor es buena, aunque pensé que existía evidencia de una continuación, ya que no responde todas las preguntas, solo te da una idea y es todo, pero quedaron algunas dudas en el aire.

La respuesta a estas sospechas me las aclaró el mismo autor, lo cual se lo agradezco. En efecto, este libro es la precuela de su libro, Lobos y posteriormente el libro Rey Lobo.

Así que, espero que el autor resuelva mis dudas, quizá algunas preguntas sean irrelevantes, pero me gustaría saber ¿Quién es la mamá de Mariana? ¿Quién es la mujer en la camioneta? ¿Por qué Mariana andaba de noche en la hacienda? Es decir, era una niña y andaba sola en la noche, sabiendo que existía un peligro latente rondando la hacienda. En fin, creo que compraré el siguiente libro del autor.
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