Acabo de terminar este libro y no puedo negar que lo disfruté un montón. Aquí seguiremos la historia de Dylan y Theo, dos personajes completamente opuestos pero que desde el primer minuto que se ven están destinados a estar juntos. Dylan trabaja en el restaurante de su tía y su pasión es la gastronomía. Desde que su madre murió él quedó a su cuidado y ella y sus primos Teo y Meg son lo más valioso de su vida. Theo es un niño rico que ha vivido rodeado de lujos. Su padre es multimillonario y por supuesto que no frecuenta los mismos sitios que frecuenta Dylan, pero sus caminos de cruzan cuando Dyl debe llevarle comida a domicilio. A partir de ese momento sus caminos están destinados a encontrarse y Dylan terminará viajando con Theo a los Hamptons para hacerse pasar por su novio… sí, un fake dating a toda regla. Me gustó bastante la historia. Es bastante juvenil y hace mucho hincapié en la cultura oriental y la gastronomía. La trama se centra en un concurso de pasteles de luna, un dulce tradicional chino, en el que Dylan participará para poder salvar el restaurante de su tía Jade. Además del cliché “Relación falsa” también podría mencionar el de “Rico/pobre” o “diferente clase social” como más les guste llamarlo. La verdad que es una historia entretenida, divertida y bastante sencilla de leer. La recomiendo si quieren pasar un rato entretenido y leer una historia LGBT+ de lo más tierna. + Leer más |