Las buenas chicas

Me encantan los libros de internado, y este tiene lugar durante el curso del año escolar en la escuela ficticia para niñas Atwater. Un internado para niñas es algo que siempre me ha intrigado, especialmente cuando era adolescente, cuando pensaba que quería asistir a uno. Por eso, tenía muchas ganas de que me gustara este libro, pero me resultó difícil entrar en él. Se cuenta desde las perspectivas de varios estudiantes, comparados con eventos escolares importantes. Cuando los estudiantes de primer año llegan para la orientación, los letreros en el jardín de toda la ciudad muestran la famosa torre del reloj de la escuela y anuncian que "un violador trabaja aquí".

Esto no es exactamente lo que esperaba de la historia. Pensé que iba a estar lleno de un drama escandaloso en torno a las denuncias de violación y agresión sexual. En cambio, fue una exploración de cada personaje de la experiencia cotidiana del internado. Sin embargo, cada capítulo sirvió como un momento fundamental que cambió la vida de la niña en torno a la cual gira el capítulo. Sin embargo, supongo que ese es el punto. Que en la mayoría de edad los momentos en la vida pueden provenir del día a día normal. No sucede demasiado en el libro. Pero sirve como un buen ejemplo de cómo las niñas (y de hecho las mujeres) pueden ser descartadas tan fácilmente cuando se trata de preocupaciones sobre el sexo.