Era la otra cabeza la que dominaba sus pensamientos, apremiada por los más bajos instintos, instigadores y malévolos, que lo alejaban cada vez más de la llave con la podría abrir la cerradura de sus sueños
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Era la otra cabeza la que dominaba sus pensamientos, apremiada por los más bajos instintos, instigadores y malévolos, que lo alejaban cada vez más de la llave con la podría abrir la cerradura de sus sueños
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¿Qué objetousaron como traslador en el Mundial de Quidditch?