Carrie

La historia de “𝐂𝐚𝐫𝐫𝐢𝐞” es un clásico de la obra de 𝐒𝐭𝐞𝐩𝐡𝐞𝐧 𝐊𝐢𝐧𝐠, su primera novela, la que lo lanzó a la fama, después de que él la lanzara a la papelera y fuese rescatada por su mujer (sabia decisión).

Vamos a empezar por lo evidente, se nota (y mucho) que es la primera novela del autor. Se vislumbra a King entre sus páginas, pero no brilla como el que conocemos hoy en día. Aún así, 𝐂𝐚𝐫𝐫𝐢𝐞 consigue entretener y hacer que te plantees determinados dilemas morales.

El tema central del libro, el 𝐛𝐮𝐥𝐥𝐲𝐢𝐧𝐠, se enfoca sobre todo en la evolución de los personajes implicados, el remordimiento, la venganza, el rencor, la maldad… King aborda muchos factores determinantes y me gusta que no caiga en el buenísimo o la maldad desenfrenada en ninguno de los dos casos. La religión, la adolescencia y el factor social también son palos que toca de forma muy acertada.

El medio para transmitir la historia me ha parecido sumamente original, ya que conocemos los 𝐬𝐮𝐜𝐞𝐬𝐨𝐬 𝐚 𝐭𝐫𝐚𝐯𝐞́𝐬 𝐝𝐞 𝐭𝐞𝐬𝐭𝐢𝐦𝐨𝐧𝐢𝐨𝐬, 𝐚𝐫𝐭𝐢́𝐜𝐮𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐩𝐫𝐞𝐧𝐬𝐚, 𝐝𝐨𝐜𝐮𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨𝐬 𝐨𝐟𝐢𝐜𝐢𝐚𝐥𝐞𝐬, 𝐞𝐭𝐜… y eso, no solo le da distintas perspectivas a la historia, sino que hace la lectura muy dinámica.

Pero, como digo, a pesar de esos elementos que me han encantado, Carrie es una historia que se me ha quedado corta, y creo que se debe principalmente a que ya había visto la película, con lo cuál, para mí no existía el factor sorpresa.

Como curiosidad, os diré que 𝐂𝐚𝐫𝐫𝐢𝐞 tiene tres adaptaciones a la pantalla, aunque la más famosa y exitosa de todas fue la primera dirigida por 𝐁𝐫𝐢𝐚𝐧 𝐝𝐞 𝐏𝐚𝐥𝐦𝐚 𝐞𝐧 𝟏𝟗𝟕𝟕 que, además, estuvo nominada a dos premios Oscars y un Globo de Oro por el trabajo de las actrices.