El hombre de arena

Hace ya un par de años que cayó en mis manos un libro titulado “El hipnotista”. Después de leerlo me convertí en fan de este par de escritores que publican bajo el pseudónimo de Lars Kepler. El tándem lo forma el matrimonio sueco compuesto por Alexander Ahndoril y Alexandra Coelho (decidieron esconder sus nombres bajo este pseudónimo para que su obra fuera recibida por el público sin opiniones preconcebidas ni prejuicios). A este libro lo siguieron dos más: “El contrato” y “La vidente” (ambos leídos también), por lo que comprenderéis mi impaciencia en hacerme con éste último, recién publicado, y ponerme a leerlo ávidamente.
Lo primero que he de mencionar es la portada, en la cual vemos que ya solamente aparece el apellido, en letras mayúsculas, del pseudónimo usado: Kepler. Es una portada que impone, asusta y da mucho que pensar. Cuando acabas de leer el libro la entiendes perfectamente.
En cuanto al título, decir que el hombre de arena es lo que da nombre al cuento más célebre del escritor E.T.A. Hoffman, publicado en el año 1817, autor perteneciente al romanticismo negro. El hombre de arena es una especie de somnífero personificado que tira arena a los ojos de los niños.
Libro narrado en tercera persona, con un ritmo trepidante, cargado de misterio y suspense, que en ocasiones llega a ser asfixiante, y que solo afloja levemente conforme llegamos al final de la novela. Hay muchos diálogos en la historia, lo que hace que sea más amena su lectura.
Toda la acción transcurre en Estocolmo, ciudad que plasman los autores con todo lujo de detalles. Personajes muy bien construidos, destacando de entre todos tres:
-Joona Linna, el protagonista de la saga Kepler. Es un comisario carismático, incorruptible, talentoso y testarudo, portador de un secreto personal que solamente él conoce. Es una persona que se deja llevar por una magistral intuición, lo cual le lleva a enfrentarse a quien haga falta con tal de demostrar que lleva la razón.
-Saga Bauer, el personaje femenino de la saga, comisaria también, que carga con algunos traumas de su infancia. Es una persona muy irascible, que no tiene conciencia de su valía como mujer, aunque es única en su trabajo.
- Por ultimo mencionar al malo maloso, Jurek Walter, el cual somete a sus víctimas a un terror psicológico de tal magnitud que algunos terminarán haciendo lo que menos deseaban hacer.
Lo que menos me ha gustado ha sido el final, porque a pesar de haberlo dejado abierto (es lógico porque así tienen la excusa perfecta para continuar con la saga), lo he tenido que leer hasta en cinco ocasiones, porque no lo entendía, no me cuadraba mucho el suceso que pone fin a la historia.
Para finalizar esta reseña, ya solo me queda recomendar encarecidamente la lectura de este libro. No hace falta haber leído las anteriores partes que componen la saga para poder seguir la historia, porque cada uno de ellos se dedica a un caso en concreto y queda cerrado al final.

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