El día que dejó de nevar en Alaska

La historia me ha gustado, pero llegó un momento en que empezó a costarme a leer porque sentía que la autora estaba mareando la perdiz en torno a la relación de Heather y Nilak. Lo que más me gustaba era los capítulos que eran entradas del diario de Annie, pues sentía mucha curiosidad por ella ya que no sabía quién era, pero llegó un momento – un poquillo más a la mitad del libro - en el que empecé a sospechar quién era y que relación tenía con el resto de los personajes y acerté de pleno.

La pluma de la autora me ha gustado mucho, es ágil y fácil de leer, lo hace todo muy sencillo, podría decir que me recordó mucho a lo que sentí cuando leí el primer libro que publicaron de ella, el de Llévame a cualquier lugar.
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