Cuando Ellie se fue

La gente intenta hacer como si hubiera algún propósito, un significado secreto, como si todo significara algo. Y no es así. Son un montón de bobos que no entienden nada. No tenemos que ser felices. No tenemos que ser normales. Ni siquiera tenemos por qué estar vivos si no queremos. Podemos hacer lo que nos venga en gana mientras no le hagamos daño a nadie

La pesadilla de todo esto es el no saber. La falta de una conclusión, un cierre. No puedo seguir adelante sin saber dónde está mi hija. Es como caminar por entre el barro. Veo algo en el horizonte, pero nunca nunca podré alcanzarlo. Es una muerte en vida.

Las historias son lo único real de este mundo. Todo lo demás es solo un sueño.

Que un hombre que no puede amar pero necesita desesperadamente ser amado es algo realmente peligroso.

De haber podido ella desovillar el tiempo y volver a hacer una bola con él, habría visto los nudos en el hilo, las señales de advertencia. Más tarde todo le resultó obvio. Pero entonces, cuando no sabía nada de nada, no lo vio venir y se precipitó en sus brazos con los ojos bien abiertos.

Cuando leo, la historia es como si fuera la vida real, y cuando lo dejo es como si volviera al sueño.

Una vez aprendes como ver el mundo, una vez dejas de intentar buscar el sentido a todo, resulta de lo más obvio.

¿Qué tiene que ver la felicidad con todo? Mira, estamos aquí sin ningún motivo en absoluto. ¿Sabes eso, verdad? La gente trata de hacer creer que hay un propósito mayor, un significado secreto, que todo significa algo. Y no lo hace. Somos un montón de monstruos. Eso es todo al respecto. Un montón de monstruos estúpidos e intrascendentes. No tenemos que ser felices. No tenemos que ser normales. Ni siquiera tenemos que estar vivos. No si no queremos. Podemos hacer lo que queramos mientras no lastimemos a nadie.

Desnuda. Igual que tú dices que hacerse mayor no es ninguna vergüenza, yo creo que estar desnuda tampoco. ¿Y no crees que, si la gente dice que no tendrían que prohibirse los burkinis en la playa, la conclusión lógica es que la desnudez tampoco tendría que estar prohibida? ¿Quién decide qué partes del cuerpo pueden ser vistas en público o qué partes no?

De haber podido ella desovillar el tiempo y volver a hacer una bola con él, habría visto los nudos en el hilo, las señales de advertencia. Más tarde todo le resultó obvio. Pero entonces, cuando no sabía nada de nada, no lo vio venir y se precipitó en sus brazos con los ojos bien abiertos.