El grimorio de los cuatro impostores

Antes de comenzar, es de bien nacido agradecer tanto a Babelio como a la editorial, el envío de este ejemplar.

Salir de tu zona de confort y adentrarse en un universo literario que desconoces tiene sus riesgos, pero cuando hay recompensa, esta sabe mucho mejor.

No seré yo quien os hable de magia, sea del color que sea, ni de ocultismo. Hacerlo supondría meterme en un jardín que no sé cultivar ni regar, y del que podría florecer cualquier cosa carente de sentido y coherencia.

Así que, mejor me dedico a lo que algo creo dominar y todos contentos.

El grimorio de los 4 impostores es un conjunto de relatos donde el primero y el último sirven para conectar con un grimorio que, aun parecido real, nunca existió.

Lo primero que me llama poderosamente la atención, es la excelente prosa del autor
Coy Hall no se conforma con relatarnos hechos y ambientes tétricos y oscuros, sino que escribe francamente bien.

Las descripciones de un entorno, en apariencia tranquila, son de enorme calidad. Esta calma será rota por impacto, sin verlo venir, incluso a partir del segundo impostor, donde sabes que vendrá lo dantesco y siempre te pilla por sorpresa.

Clasificar esta obra en un solo género es imposible, pero si algo tengo claro es que no estamos ante una ficción histórica y mucho menos medieval.
Hay algún dato histórico, pero no es suficiente, y si los hechos se sitúan en los siglos XVII y XVIII, en todo caso, corresponderían a la Edad Moderna.

Si que podemos encontrar ciertos guiños a la fantasía, a lo gótico y en especial, a lo grotesco. Los de estómago delicado van a saborear momentos exquisitos.

Si de dilatar mentes se trata, (me encanta el nombre de esta editorial) objetivo cumplido. He leído unos relatos novelados que, a pesar de no saber (ni querer hacerlo) a que género pertenecen, he disfrutado mucho con una prosa elegante, llena de sobresaltos, bichos repelentes, y conceptos de magia que solo una buena suegra es capaz de dominar.

Su mayor virtud, la estilizada narrativa del autor.

"El Grimorio de los cuatro impostores" es un viaje al corazón de la oscuridad, un cuento laberíntico ambientado en el siglo XVII que entrelaza horror, ficción histórica y un toque de fantasía. Coy Hall crea magistralmente seis historias interconectadas, cada una de las cuales es una pieza de un mosaico inquietante más grande. El libro resuena en una atmósfera macabra en la cual se adentran cuatro personajes principales: un monje, un verdugo, un erudito ocultista y un aventurero, cada uno de ellos se encontrará con un impostor que altera su entendimiento del mundo, para que vean horrores inconcebibles.

El ingenio estructural del libro es su piedra angular. Se abre y se cierra con capítulos enmarcados ambientados en 1690 y 1724. Los cuentos atraviesan un espectro de temas oscuros. En el primero nos adentraremos en unos bosques misteriosos donde habitan extrañas bestias. En el segundo impostor sabremos de una terrorífica bruja y una rata capaz de transformarse. Os juro que esa transformación es espantosa. le seguirán unos espeluznantes sucesos ocurridos en una isla del Caribe, tiene un fondo de horror cósmico. El cuarto impostor, no quiero dejar spoilers, pero para mí es la más terrible de leer. Estas historias de cuatro impostores se entrelazan con dos encuentros que profundizan en la historia del grimorio titular. Este grimorio es obviamente un tomo inventado por el autor, pero éste se esfuerza en hacernos creer que todavía existen ejemplares y traducciones, un poco al estilo del "Necronomicon" de Lovecraft. Es un recurso que me encanta porque creo que ha sido poco explotado en la literatura de terror, en un proceso que podríamos llamar de "mitología creativa".

Son narraciones aterradoras que nos transportan a través de paisajes variados, con personajes tan diferentes como pueden ser bestias inimaginables, brujas, marineros abandonados, un verdugo, un húngaro rico, una abadía, sacerdotes corruptos, eruditos de lo oculto... Repletas de horrores sobrenaturales y horrores humanos como son las guerras, los fanáticos religiosos, el colonialismo, de locura, seres malignos, ocultismo

Lo que hace tan especial al Grimorio de los cuatro impostores es su naturaleza paradójica. Presentada como una novela, se lee como una colección de cuentos, y cada pieza contribuye a un universo compartido. La brillantez de la narración de Hall radica en su confianza en la inteligencia del lector, entrelazando sutilmente referencias históricas y culturales en la narrativa sin una exposición abierta. Este enfoque no sólo enriquece la experiencia de lectura, sino que también anima a los lectores a participar activamente en el texto, uniendo las conexiones sutiles y las pistas ocultas que unen las historias.

Cada historia, aunque mantiene su individualidad, contribuye a la narrativa general del grimorio, un depósito de conocimientos prohibidos y oscuros secretos. Nos maravillamos ante la escritura de Hall, esta no es una carrera corta sino una maratón, que requiere que el lector saboree cada palabra, cada oración. Es un libro que exige atención y contemplación, recompensando a quienes invierten en su desarrollo lento con una narración rica. El formato interconectado de las historias sirve no sólo como un dispositivo narrativo sino como un medio para realzar la profundidad y complejidad del mundo que Hall ha creado. A pesar de su estilo narrativo distante, que puede dificultar la conexión emocional con los personajes, el libro cautiva por su encanto enigmático y su erudita atención al detalle. Nos ofrece una experiencia de lectura única que se destaca en el ámbito de la ficción de terror.

Estéticamente, el libro es un tesoro de prosa descriptiva y detalles atmosféricos, que captura brillantemente la esencia de lo oculto y la fusiona con elementos de terror folklórico y gótico. Cada cuento está intrincadamente conectado con los demás, unidos por una criatura no humana, aunque lo parece.

Estamos ante una combinación magistral de horror, historia y fantasía, marcada por una narración intrincada. Coy Hall emerge como una voz prometedora en la literatura de terror, ofreciendo una novela que no sólo es intelectualmente estimulante sino también profundamente inmersiva. Es un testimonio de la habilidad de Hall como narrador y su maestría para crear un mundo que es tan inquietante como hermoso. Probablemente sea uno de los pocos autores actuales que sabe combinar tan soberbiamente la novela histórica más clásica con el relato weird y gótico.

Abraza al mártir
Prueba la belladona
Saborea la salmuera
Empuña el hacha
Descifra el Grimorio

Abrid el libro, poned vuestros ojos en cada una de sus páginas, buscar la conexión y luego dejad la luz encendida para dormir.

Preparaos hacia un viaje a lo oculto, donde la historia se transforma en terror

-𝐄𝐥 𝐠𝐫𝐢𝐦𝐨𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐨𝐬 𝐜𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨 𝐢𝐦𝐩𝐨𝐬𝐭𝐨𝐫𝐞𝐬-
En esta curiosa antología de relatos de terror, ambientados alrededor del siglo XVII, predomina la referencia constante a un misterioso volumen escrito, que es el que da título al libro: El grimorio de los cuatro impostores.

Una original combinación de terror, ficción histórica y fantasía, que nos presenta, en seis historias interconectadas, cuatro personajes principales: un monje, un verdugo, un erudito ocultista y un aventurero, en las que cada uno de ellos se encontrará con un impostor, que le mostrará horrores de un mundo tan terrible como bello.

Creo que el punto fuerte del autor, es la ambientación gótica, ya que consigue transmitir de un modo inquietante, la oscuridad, el frío, y las costumbres de su mundo, contribuyendo con ello al contenido del propio grimorio, como un depósito de conocimientos prohibidos y secretos oscuros.

Es un libro que exige atención y leerse con calma, y contemplación al detalle, ya que cada relato contribuye a un universo común, y  anima al lector a participar activamente en descubrir pistas y mensajes ocultos, comvirtiéndo la experiencia en algo único.

Una lectura de la editorial @dilatandomentes que aunque se sale de mi zona de confort, que me ha sorprendido mucho. Aveces sólo saliendo de nuestro estilo habitual, descubrimos nuevos intereses.

El Grimorio de lo Cuatro Impostores está formado por un total de 6 relatos que guardan conexión entre ellos, lo cual es un punto muy interesante, ya que cada uno presenta sus propios personajes y lugares.

4 relatos son el eje principal, cuyas tramas giran entorno a un impostor. Los otros dos relatos encabezan y concluyen el libro, dándole sentido a la conexión entre ellos. Cierto personaje femenino me ha fascinado.

Me ha gustado mucho la ambientación, esa mezcla de histórica (no es medieval pero tiene cierto parecido), gótico, terror... Hay escenas de lo más turbias y, pese a que unos me han gustado más que otros, es una lectura muy entretenida.

Si tuviera que elegir un relato, me quedo con «El Cuarto Impostor: El Señor del Hacha». ¡Qué oscuro e impactactante! Me ha encantado. Tiene todo lo que busco en un relato (que me impresione y no me sepa a poco)

No es de mis antologías preferidas, pero sí la he disfrutado, sobretodo de cara al final.