Recortes de mí

Desde ese momento dejamos de orbitar en el mismo rumbo. Él siempre estaba malhumorado, aunque cuando el alcohol fluía por sus venas mi universo se desvanecía en un agujero negro de golpes e insultos.

«Vuela, vuela alto y no escondas tus alas. Disfruta de cada segundo que te brinda la vida, aunque esta sea una perra. El final es este y no hay que temer al mundo por nada. Hay que ser uno mismo y dar lo mejor que tengamos para recibir. Escucha a tu corazón.»

Sé feliz, porque TÚ te lo mereces.

Si escoges el camino literato engánchate a una buena novela de Levy. Si te vas por la música, Blas Cantó puede ser la solución. Cuando se recupere la normalidad se van a llevar un gran abrazo de mi parte y les voy a decir la siguiente frase mágica: «Gracias por encontrar mi felicidad».

“El 10% de tu 100%, es más que el 100%, que te pueda dar alguien”

Piedra, papel o tijera La vida es como este juego de nuestra infancia. Nos ponen muchas piedras por el camino para perseguir nuestros sueños. Para estos, siempre hace falta estar de trámites, de papeles… y cuando tienes las tijeras en mano y puedes desempeñarlo. ¡Zas! Otra piedra y vuelta a empezar.