Inés y la Alegría me ha gustado bastante más que el anterior, El Corazón Helado, que ahora veo más como un ensayo previo a estos Episodios de una guerra interminable. Lo único que me ha dificultado la lectura es los múltiples saltos temporales de la novela, a veces en el mismo párrafo, que iban de la guerra civil a la Invasión de Arán, de los sesenta a la posguerra y de Toulouse a Madrid y tiro porque me toca. No tenía ni idea de que existiera una Invasión del Valle de Arán en los años cuarenta y ahora me parece un tema fascinante sobre el que me gustaría saber más, aunque Almudena Grandes ya nos cuenta bastante, que para eso la novela tiene setecientas y pico páginas. Entre Galán e Inés me quedo con ella, me parece mucho más interesante y narra mucho mejor, aunque toda la historia salga de la pluma de Grandes, claro. Qué sí, que le sobran unas cuantas páginas (muchas) y que la prosa a veces puede parecer rimbombante pero el libro merece muchísimo la pena y en la recta final es que ya directamente te lo comes con patatas, no puedes parar de leer. Ahora quiero unas rosquillas, joé.
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