13 milímetros - Angela

Por fin la esperada tercera parte de 13 Milímetros, la novela sobre el narcotraficante Annibal Scorpio.


Si no has leído las dos primeras partes, será mejor que lo hagas antes de seguir leyendo, pues esta reseña llevará algún spoiler con respecto a ellas.


En O'Quinn acabamos con un descubrimiento que ponía a Angela en serio peligro: Annibal descubría, gracias a la pulsera que Johnny logró arrebatarle, que la joven rubia podría estar detrás de los misteriosos asesinatos. Si aquello nos dejaba con gran intriga y expectación, cada página de Angela es un nuevo descubrimiento, de angustia casi constante, en el que querremos saber tanto el pasado como el presente de los distintos personajes de la obra.


La primera novedad que vamos a encontrar en Angela es que conoceremos los acontecimientos pasados desde la perspectiva de este personaje, narrados en primera persona.


Así, conoceremos a una Angela más dura, inteligente, ruda y fuerte de lo que habríamos podido imaginar en algún momento, tras esa máscara de inocencia.


Pero sin duda, lo que más impacta en esta tercera parte de la pentalogía 13 Milímetros, es la crudeza y sensibilidad con la que están escritos algunos de los capítulos. Podemos apreciar una mayor dureza y realidad a la hora de narrar ciertos aspectos de los personajes y de las situaciones que se ven obligados a vivir. Entre ellos, el capítulo dedicado a Sylvia, la hermana de Annibal Scorpio.


La evolución continua de los personajes y sus sentimientos, así como el ir conociendo más a aquellos que nos han pasado casi desapercibidos o de los que sabíamos poco, convierten a Angela en el punto central de conocimiento de esta trama que se va complicando cada vez más.

Supone, por tanto, el eje principal de la historia para así poder comprender lo que está sucediendo en todo momento.

La idea que rodea a Angela en cuanto a su pasado, resulta original y creíble, y nos permite empatizar con el personaje y comprenderlo, así como evaluar hasta qué punto puede equivocarse una persona, viendo lo que desea ver.

La manera en la que Beatriz G. López trata la doble cara de una persona, cómo una persona que para alguien es su pilar principal, para otra puede ser quien destruya su vida, me parece del todo acertada. 

Además, trata temas de actualidad que cada vez son más visibles y denunciables como la violencia de género o la violación. Puede resultar duro para el lector, pero es totalmente necesario, puesto que es una dolorosa realidad a la que muchas mujeres se enfrentan a diario.


Pero si hay algo que quiero destacar es el hecho de que no resulte previsible ni pesada. Cada nuevo misterio está elegantemente ligado a los anteriores, sin resultar algo pesado que lleve al lector a cansarse de la lectura de la obra.


Una vez más, puedo considerar la obra de Beatriz G. López como una lectura imprescindible para los amantes de la novela negra.