Bajo mi cielo azul

Yaiza nos tiende la mano de Adelaide para acompañarle en su nueva vida en París dejando atrás un pasado que aún a pesar de la distancia le atormentará el resto de sus días. Una vida que te atrapará por completo con cada línea.


Adelaide nos muestra lo que es la vida cotidiana con una enfermedad mental causada por traumas del pasado y con todos los síntomas que ello conlleva. Acostumbrarte a convivir con el vacío crónico, con pensamientos instrusivos, las voces que te acompañan a todas horas juzgando todo lo que haces o dejas de hacer...


Adelaide nos permite empatizar con ella, mostrándonos su lado más íntimo  a través de sus diarios, refugiándose en la escritura para desahogar su sufrimiento en el papel, y en la literatura, identificándose con personajes de clásicos como El lobo estepario, entre otros,que no te dejarán indiferente si eres un amante de la lectura.

Nos describe como se siente el dolor en nuestro interior que tanto nos agota física y mentalmente, del que a veces solo hay escapatoria con un viaje a través de pastillas y el alcohol, para evadirnos de este mundo cruel. Esos viajes le conducirán hacia una realidad paralela imaginaria para soportar la que tiene que vivir diariamente.

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