Yo, Beatrice Golden

Fernando Codina es un autor que sabe transmitir sentimientos. Su última novela publicada, “Yo, Beatrice Golden” se mueve por la hermosa sensación del amor. Pero no, no estamos ante una novela romántica... según te vas introduciendo en la historia entiendes que estás ante una mezcla de géneros.

Beatriz es la joven protagonista que usa un blog para enseñar su alma y escribir de dos amores que no pueden ser más diferentes. Sí, habéis leído bien, dos… Todo empezará en septiembre del 2015 y terminará en noviembre del 2016. ¿Y qué nos va a contar en todo este tiempo? Recuerdos, sus sueños, como conoció a las personas con las qué va compartiendo su vida, encuentros, experiencias, incluso sus fracasos, porque a ella le gustan las historias de amor… aunque una de esas vivencias sea con alguien del mundo sobrenatural…

No es fácil para una chica joven aclarar sentimientos, por eso el autor uso un estilo en primera persona adentrándonos en una narración descarnada. Sorprende la calidad del personaje femenino, siendo creado por un hombre, y es que Fernando Codina se puso en su piel, tanto que la hizo real. Todo lo que vaya narrando no solo lo sentiremos verídico, es que vamos a tener la extraña sensación de que lo cuenta exclusivamente al lector que lo esté leyendo. Unas memorias acompañadas de un toque de humor, aunque a veces llevan melancolía o preguntas internas a las que les sigue buscando respuestas.

Y luego, están los relatos. Codina es un gran escritor de relatos, su imaginación no tiene límites, da igual el género que toque, dé nuevo utilizará a Beatrice, la cual detendrá sus escritos y narrará historias cortas de momentos especiales, relatos inventados con el fin de hacer realidad hechos imposibles, sacados a veces de una simple imagen, un amigo que le cuenta algo, emocionales y encantadores… relatos ajenos o no tanto de la historia principal, usando un cambio de letra para diferenciarlo del resto de la trama. Tal vez os saquen de la narración principal, pero valen mucho la pena leerlos porque el autor no escatimó en descripciones, transformando el ritmo más o menos tranquilo en otro más tenso, acercándonos al lado oscuro.

Este es un libro de emociones, sentirás alegría y pena, desearás detener la lectura y seguir leyendo. Aquí la ternura y el erotismo deberán ganar el pulso a la propia vida para que una mujer sepa elegir quien le acompañará en su camino.

Una novela muy humana que por la edad de su protagonista no va dirigida a lectores jóvenes, lo que ella mueve lo vivimos y sentimos hombres y mujeres de todas las edades.

Si sois de los que disfrutáis de una novela de amor, sin llegar a ser una novela romántica al uso, es vuestra lectura.