Primer libro de Agatha Christie que leo y la verdad es que me ha sorprendido muy gratamente. El libro cuenta como 10 personas de diferentes condiciones sociales, sexo y edad reciben una carta invitándoles a pasar un tiempo en una mansión en una isla llamada La Isla del Negro. Cada carta está personalizada para hacer más tentadora la invitación, y por si fuera poco la isla está envuelta en misterio debido a ciertos rumores del pasado. Las cartas las firman un tal Sr. Owen. La primera, noche después de cenar, se pone en marcha una grabación que acusa a los diez invitados de asesinato, asesinatos que a ojos de la ley sería muy difícil de acusar, y justo después uno de los invitados muere. Los invitados van muriendo siguiendo el orden de una canción de cuna. al no haber nadie en la isla se llega a la conclusión de que el asesino tiene que ser uno de ellos, y esa es la trama principal del libro, averiguar quien es el asesino. El libro se lee muy rápido, además de ser un libro corto hay muchos diálogos y no se usa un vocabulario rebuscado. Una cosa que me ha gustado muchísimo es que la autora no se anda por las ramas y eso se ve ya en el primer capítulo, un capítulo presentando uno a uno a los personajes, aprovechando para, a través de los personajes, describir también dónde se va a desarrollar la historia, sin nada de paja y directa al grano. Y la verdad es que para mi todo el libro ha sido así, no ha habido ningún capítulo que me haya dado la impresión que fuera de relleno. Pero a pesar de ser tan directo crea perfectamente el aura de misterio y de la angustia y paranoia de los personajes de no saber quien de ellos es el asesino. Libro totalmente recomendable para iniciarse en el género de detectives sin duda. |