“El día que se perdió el amor” es la esperada segunda parte de “El día que se perdió la cordura” de Javier Castillo. En esta segunda parte, se cierran todas las tramas que se quedaron abiertas en la primera parte. La historia es similar a la de la primera parte. Los personajes, los giros en la historia, el argumento ... hasta el ritmo de escritura y la forma de relatarla es similar a la de la primera parte. El esquema se repite. Mismos ingredientes: secuestros, amor, locuras, investigaciones y misterios. Los capítulos son cortos, y cada uno está escrito por un personaje diferente, alternando también los tiempos, tanto pasado como presente. Lo que provocan agilidad a la historia y deja al lector con ganas de seguir leyendo. A pesar de tener la misma estructura que el primer libro; entretiene. Eso sí, al repetirse el esquema, pierde el factor sorpresa de la historia anterior. Me ha gustado menos que la primera parte, por eso mismo. |