La sirena

Leí la trilogía de la selección hace años y, aunque la disfruté, nunca me había animado a leer nada más sobre la autora.
Me he puesto a pensar y creo que jamás había leído ningún libro sobre sirenas (al menos no con sirenas como protagonistas). de hecho, después de ver su peculiar forma de actuar y de vivir, entiendo que no haya muchas historias sobre estos seres mitológicos. Os cuento el enfoque del libro: las sirenas son chicas que han sido salvadas de ser ahogadas por Oceania, la cual a cambio les pide que pasen a ser de su propiedad durante cien años y acudan a ella cuando necesite alimentarse. Así, las sirenas se ven obligadas a cantar hipnotizando a los tripulantes de los barcos para que se ahoguen sin remedio y de ese modo mantener el equilibrio en el mundo.

Sin embargo, Kahlen no se siente cómoda en su papel, odia su trabajo y se siente como un monstruo cada vez que tiene que cantar y ver morir a la gente. Esto hace que se aísle del mundo y no quiera tener relación con ningún humano para no ponerle en peligro (si escuchan su voz, morirían sin remedio). Sin embargo, cuando conoce a Akinli, un chico que quiere ser su amigo a pesar de que ella no dice ni una palabra, acaba replanteándose toda su vida y deseando tener un oportunidad de ser feliz.


Al principio me costó bastante meterme en la historia, el ritmo era bastante lento y no acababa de atraparme el argumento. Aun así, a medida que fui avanzando con el libro fue mejorando y acabó enganchándome. de hecho, lloré bastante con la historia por las cosas tan duras y dramáticas que tenían que vivir los personajes.

Lo más destacado son las sirenas y la amistad que las une a todas ellas. A lo largo de la narración conoceremos las historias de cada una de ellas, así como sus pasiones. Todas son chicas muy diferentes, pero han conseguido amoldarse unas a otras y a convertirse en auténticas hermanas incondicionales capaces de hacer lo que sea las unas por las otras.

También es curioso el papel de Oceania, tiene una bipolaridad que enriquece bastante al libro pues te pone en encrucijadas en múltiples ocasiones. Ella no tiene tampoco poder de cambiar: necesita alimentarse y para ello tiene que morir gente. Sin embargo, no disfruta con ello. Quiere a sus sirenas de forma incondicional, aunque también son de su propiedad y no duda en comportarse con tiranía con ellas cuando lo considera necesario. Es una especie de dictadora amable.

Con respecto a la historia de amor, Kahlen y Akinli me han parecido dos personajes muy adorables y tiernos. He sufrido con ellos durante toda la historia porque es una historia de amor imposible y, a la vez, sientes que deben estar juntos. de hecho, a medida que leía tenía serias dudas sobre cómo podría resolverse todo. Sin embargo, el final me sorprendió y me resultó factible dentro del mundo de fantasía (algo a lo que llegué a tener mucho miedo a lo largo de la lectura).

En definitiva, La sirena es una historia dulce para leer en verano que nos enseña otro punto de vista de este animal mitológico. Sin embargo, no la considero imprescindible, ni creo que permanezca en mi memoria durante demasiado tiempo.
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