Un lugar para soñar

Era una mujer con espíritu. Y también le había parecido atractiva. Pequeña, rubia, con los ojos azules, la boca en forma de corazón y un trasero que sus vaqueros realzaban de forma notable.

Además, ahora pertenezco a este lugar. Este lugar forma parte de mi vida.

-Vine aquí porque creía haber perdido todo lo que realmente me importaba y he terminado encontrando todo lo que quería.

-No es un lugar perdido de la mano de Dios, Joey. Es... -se esforzó en encontrar la palabra adecuada-, es un lugar maravilloso. Es cierto que la arquitectura deja mucho que desear. La mayor parte de las casas son viejas y pequeñas. Pero el paisaje es sobrecogedor. Y no estoy sola. Tengo un pueblo. Jamás en mi vida había tenido un pueblo.

-Mel, puedo asegurarte que éste es un buen lugar para curar las heridas del corazón.
-¿Lo dices por propia experiencia?
-De alguna manera, sí. Pero yo no vine aquí asustado. Estaba buscando un lugar como éste, en el que hubiera buena pesca y buena caza. Un lugar aislado del mundo y sencillo, en el que pudiera encontrar aire fresco, valores decentes y gente trabajadora y dispuesta a ayudarse. Y eso es todo lo que he encontrado aquí.

-Tanto tú como yo sabemos que a ti no podría tirarte al suelo -le dijo con una sonrisa.

-Usted ha venido aquí a trabajar, ¿no es cierto?
-Pero usted dijo que no me quería -señaló ella.
-Sí, y también dijo usted que no nos quería a nosotros, pero continúa aquí -se puso la chaqueta y recogió su maletín.

Ella pensaba que Virgin River sería un lugar en el que mitigar el dolor, la soledad y el miedo.

-¿Un poco más arreglada? Señora McCrea, esta casa se está cayendo. ¡Usted me dijo que era un lugar adorable! ¡Me dijo que era preciosa!
-Dios mío -fue la respuesta de la señora McCrea-. En el registro no me dijeron que era tan melodramática.
-Y a mí tampoco me dijeron que usted me iba a engañar.

Mark le había dicho en una ocasión que lo suyo, su relación, era para siempre. Y «para siempre» había durado rado cuatro años. Ella sólo tenía treinta y dos años y durante el resto de su vida estaría sola. Mark estaba muerto. Y ella estaba muerta por dentro.