-¿Tú qué ves cuando te despiertas por las mañanas, Predicador? Una bonita tienda de campaña, ¿verdad? Pues yo veo un triste páramo...
|
-¿Tú qué ves cuando te despiertas por las mañanas, Predicador? Una bonita tienda de campaña, ¿verdad? Pues yo veo un triste páramo...
|
-¿Sabes? Hay una norma inquebrantable sobre las opiniones: sólo son buenas cuando hay alguien que de verdad quiere oírlas.
|
-Es la primera vez en mi vida que voy de compras con una mujer. Y no me ha parecido horrible.
|
-¿Qué haces tú cuando estás asustado? -Tengo dos opciones: o me entran ganas de orinar, o me enfado. |
-En los marines, se decía que todo el mundo tiene miedo, pero que hay que aprender a utilizarlo en beneficio propio. Pero si alguna vez llegas a descubrir cómo se hace eso, no te olvides de decírmelo.
|
Los nombres de personajes en un libro aparecen: