Bruja Luna, Rey Araña

SPANISH REVIEW

Después de ganar el prestigioso Premio Booker, los autores a menudo enfrentan el desafío de decidir qué escribir a continuación. Este dilema, que gira en torno a si mantener su estilo exitoso o aventurarse en nuevos territorios creativos, no es sencillo. La presión es evidente, ya que varios ganadores anteriores no han publicado otra novela desde su victoria. Sin embargo, Marlon James, un novelista jamaicano, ha navegado con audacia esta fase post-Booker. Tras ganar el premio en 2015 con “Breve Historia de Siete Asesinatos”, una novela sobre el intento de asesinato de Bob Marley, James contempló escribir una narrativa más tranquila y literaria sobre jamaicanos en Nueva York. En cambio, sorprendió a los lectores con “Black Leopard, Red Wolf” en 2019. Esta novela, una fantasía vívida ambientada en una antigua África mítica, presenta una variedad de personajes con superpoderes, incluyendo a una bruja de 300 años, Sogolon, luchando contra demonios asesinos de niños. La naturaleza intensa y contradictoria del libro amplía el alcance de las narrativas de fantasía, presentando una visión cruda e imaginativa de África.

“Black Leopard, Red Wolf” es una lectura compleja y exigente, llena de contenido gráfico y giros inesperados. Plantea preguntas sobre la sexualidad fluida de sus personajes y sus temas antipatriarcales, entrelazados con lenguaje explícito y violencia gráfica. Esta mezcla de elementos refleja la ambición de James de redefinir el género de fantasía y recuperar la emoción de su juventud, llena de novelas de Star Wars y cómics de X-Men. La secuela, “Moon Witch, Spider King”, reduce ligeramente la intensidad mientras profundiza en la historia de Sogolon. Explora su viaje desde una infancia problemática, marcada por el abuso y la servidumbre, hasta el descubrimiento de sus formidables poderes telequinéticos. La prosa desafiante y el estilo narrativo de la novela requieren una atención cuidadosa del lector, ya que a menudo deja mucho a la interpretación, incluyendo las identidades y diálogos de los personajes.

La estructura de la novela es intrincada, con constantes cambios de escenario y difuminando las líneas entre la realidad y los sueños. Representa un mundo donde lo fantástico es normal, ejemplificado en una escena donde Sogolon da a luz a cachorros de león literales. La complejidad y ambigüedad de la narrativa presentan una rigurosa prueba para los lectores, con puntos clave de la trama y personajes que a menudo permanecen elusivos. El aspecto más convincente de la novela es su representación de las relaciones, particularmente entre Sogolon y Keme, el padre de sus cachorros. Sus interacciones intensas y a veces perturbadoras se destacan en un libro que, por lo demás, se centra en elementos sensacionales. A pesar de sus desafíos, los lectores invertidos en la trilogía probablemente estén ansiosos por la entrega final, que promete aventurarse en el horror, ofreciendo potencialmente una conclusión emocionante e inquietante a este singular viaje literario.

ENGLISH REVIEW

After winning the prestigious Booker Prize, authors often face the challenge of deciding what to write next. This dilemma, revolving around whether to maintain their successful style or venture into new creative territories, is not simple. The pressure is evident, as several previous winners have not published another novel since their victory. However, Marlon James, a Jamaican novelist, has boldly navigated this post-Booker phase. After winning the prize in 2015 with “A Brief History of Seven Killings,” a novel about the attempted assassination of Bob Marley, James considered writing a quieter, more literary narrative about Jamaicans in New York. Instead, he surprised readers with “Black Leopard, Red Wolf” in 2019. This novel, a vivid fantasy set in a mythical ancient Africa, features a variety of superpowered characters, including a 300-year-old witch, Sogolon, battling child-murdering demons. The book's intense and contradictory nature broadens the scope of fantasy narratives, presenting a raw and imaginative vision of Africa.

“Black Leopard, Red Wolf” is a complex and demanding read, filled with graphic content and unexpected twists. It raises questions about the fluid sexuality of its characters and its anti-patriarchal themes, interwoven with explicit language and graphic violence. This blend of elements reflects James's ambition to redefine the fantasy genre and recapture the excitement of his youth, filled with Star Wars novels and X-Men comics. The sequel, “Moon Witch, Spider King,” slightly tones down the intensity while delving deeper into Sogolon's backstory. It explores her journey from a troubled childhood, marked by abuse and servitude, to the discovery of her formidable telekinetic powers. The novel's challenging prose and narrative style require careful attention from the reader, as it often leaves much to interpretation, including character identities and dialogues.

The novel's structure is intricate, with constant changes of setting and blurring the lines between reality and dreams. It portrays a world where the fantastical is normal, exemplified in a scene where Sogolon gives birth to literal lion cubs. The narrative's complexity and ambiguity present a rigorous test for readers, with key plot points and characters often remaining elusive. The most compelling aspect of the novel is its portrayal of relationships, particularly between Sogolon and Keme, the father of her cubs. Their intense and sometimes disturbing interactions stand out in a book that otherwise focuses on sensational elements. Despite its challenges, readers invested in the trilogy are likely eager for the final installment, which promises to venture into horror, potentially offering an exciting and unsettling conclusion to this unique literary journey.


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