Qué historia tan bonita. Tan llena de nostalgia y añoranza por los días luminosos. Esos días pasados que, al recordarlos, te devuelven por unos instantes la alegría, las risas, la paz que sentías en ese momento. Revives tus propios días mientras observas los de tres niños que juegan tranquilamente, momentos sencillos y cotidianos, aparentemente triviales, pero que te van adentrando poco a poco en sus vidas y las de sus familias. Sus historias, su pasado, sus madres. Unas mujeres muy diferentes entre sí pero que comienzan a entrelazar sus vidas, casi sin darse cuenta, conociéndose, con sus luces y sombras, apoyándose. Años más tarde, siendo ya jóvenes, esos niños viajan lejos del pueblo de su infancia y es ahí donde se pone a prueba su amistad. El amor, las mentiras y los sentimientos de culpabilidad comienzan a hacer acto de presencia sacando a la luz secretos del pasado. No conocía a esta autora, nunca había oído de ella y me ha gustado tanto su forma de escribir que podría decir que ha sido para mí uno de los descubrimientos del año, y qué mejor momento que en el #leoautorasoct. Con una narración delicada y con muchos pequeños detalles, frases llenas de sencillez y belleza, me ha sorprendido desde las primeras páginas. Lo he ido leyendo a sorbitos, últimamente no tengo mucho tiempo, y quizá por eso en algún momento se me hizo un poco cuesta arriba, ya que tiene un ritmo pausado y al leerlo tan despacio me costó engancharme en algún momento. Pero al llegar al final veo que el viaje me ha valido muchísimo la pena, sin duda lo releeré dentro de un tiempo un poco más del tirón. Qué pena que autoras como ella no sean más conocidas, al menos aquí en España. Ojalá que alguien le dé una oportunidad y este libro tenga más visibilidad porque es una joyita. + Leer más |