MARIPOPIS

"Maripopis" es un cuento infantil escrito e ilustrado por Paloma Bordons.

Pertenece a la colección de "Tucán Verde", de Edebé, ideal para niños de 10 años en adelante. La serie Tucán está creada para niños de diferentes edades, cada franja de edad diferenciada por un color, pero todas llevan en mismo estilo de edición. Es de agradecer este detalle ya que puede ayudar a ciertos niños con TOC o autismo, los cuales suelen seguir una rutina y costumbres y cualquier cambio les puede perjudicar. de esta manera, acompañará a los niños en su crecimiento.

Paloma Bordons ha publicado más de una treintena de libros para niños y jóvenes. Ha quedado varias veces finalista del Premio El Barco de Vapor y en 2004 se hizo con dicho premio con el libro "Sombra". En ese mismo año ganó el Premio Edebé de Literatura Infantil.

Las ilustraciones son en blanco y negro y con un toque entre infantil y adulto. Las expresiones de los personajes resultan de lo más caricaturescas, tal y como muestra la portada, por lo que los niños se van a reír mucho con ellas. Lo cierto es que las caras de los personajes es lo que más llama la atención y en lo que la autora ha centrado sus trazos, quedando los cuerpos en ocasiones con un estilo diferente. No conocía el trabajo de Paloma Bordons y la verdad es que me ha gustado y me ha resultado muy curioso. Se nota que ya es libro ideado para niños más mayores, ya que encontramos menos ilustraciones que en los que son para menor edad.

"Maripopis" es una historia muy entrañable, en la que la autora destaca el valor de la amistad y el respeto hacia los demás.

Todo el mundo ve a Mariano como el raro de clase. le ponen diferentes motes y se meten con él porque lleva paraguas. Por eso le pusieron el mote de Maripopis, entre otros muchos. Pero Mariano sigue llevando paraguas para usar cuando llueve, porque sí, como él dice, le da igual lo que los demás digan.

Un día, el padre de Carla invita a Mariano a ir con ellos a clase en Boli, el taxi que conduce. Desde ese día, todos ven también a Carla como la rara por ir con Mariano. Aunque ella hace lo posible por alejarse de él, finalmente comprende que Mariano es como es y no tiene que cambiar por los demás, son los demás los que tienen que respetarlo.

Me ha gustado mucho la figura de Mariano, ya que a pesar de todo lo que le ocurre, él nunca se enfada ni se mete con los demás, al contrario, si los puede ayudar, como con Lobo, lo hace y no piensa en nada más.

Gracias a Mariano, y también a Beltrán, un antiguo compañero de clase del padre de Carla, los niños comprenderán que las malas actuaciones, los motes o las bromas pesadas, no son "sólo cosas de niños" como se suele decir. Hay que parar el bullying ya que puede traer consecuencias graves, y además los remordimientos, ya que quién ha pasado por ello no puede olvidar tan fácilmente a pesar del paso del tiempo.

Desde mi punto de vista, tiene también un mensaje para los adultos, y es que no se debe proyectar en los hijos los sueños de uno. Carla va a clases de violín porque a su madre le hubiera gustado ir y ser una violinista famosa. Pero la realidad es que Carla odia el violín y va obligada por su madre. Los niños tienen que buscar su propio camino y gustos y no sentir esa responsabilidad de lo que hubieran querido hacer sus padres o cualquier adulto de la familia.
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