Tan tuyo como tu muerte

Cuando pensaba que ya había visto todo en cuanto a perfiles para los personajes de una novela de intriga, aparece Emili y me sorprende con un hombre que literalmente está apurando los últimos días de su vida intentando salvar a otra persona. En cuanto lees el prólogo pasan por tu cabeza mil posibilidades y cuando comienzas a leerlo, te acompañan a lo largo de toda la trama la rabia y el deseo de que las cosas cambien para Abel. Increíble pero cierto, ese carácter tal vez efímero que le confiere a nuestro protagonista le ofrece a la obra una sutil diferenciación con respecto a otras de su mismo género.

Abel es un personaje peculiar, con una existencia que había sido un asco, acostumbrado a mentir sobre ella, pero tan solo porque no tenía nada interesante que contar. Enrabiado, ya no con el mundo, sino tan solo consigo mismo, le toca enfrentarse en ese duro trance en el que se encuentra, en el que ya no cree en nada, con una sonrisa de postal de Navidad a la que le es difícil negarle nada: su joven compañera, inmune al mal humor, con la capacidad de levantarle el ánimo incluso a un cascarrabias como él y que le arrastrará en pos de una asesina. Juntos forman la pareja perfecta, él siempre metiéndose con ella y Azucena, por supuesto, pasando de todo lo que Abel le cuenta, con conversaciones graciosas y también algún que otro momento muy tierno.

La investigación girará en torno a la desaparición de una chica, pero pronto todo ello se enredará en un complicado entramado de situaciones que tendrán al lector dando vueltas en torno a ella, en un intento de ir encajando las piezas, sin poder despegarse de las hojas para desvelar todos los secretos que se esconden en la obra.

Un aspecto destacable es como el autor va alternando la investigación en tiempo presente, y la desaparición de la chica en unos días anteriores, eso nos permite conocer de antemano lo que va a suceder o eso creemos, cortándolo siempre en el mejor momento despejando algunas dudas pero creando un sinfín de nuevas incógnitas.

“Tan tuyo como tu muerte” habla precisamente de ello, de las muertes esperadas y aquellas que sobrevienen sin esperarlo, las que llegan después de mucho sufrimiento o aquellas que a veces deseamos. Una obra agridulce, debido a ese personaje al que acompañaremos tal vez en sus últimos días, que nos entretendrá con ese humor ácido, que intentará resolver un caso que se va complicando por momentos, con un giro final en verdad inesperado. Una intriga constante, tanto en la investigación como con respecto a la vida de Abel, que nos mantendrá atrapados en sus hojas esperando a que llegue la última página y descubrir si los milagros existen.


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Libro que me ha gustado mucho de principio a fin porque es de esos libros que hasta la última página el autor no te desvela que ha ocurrido realmente. Cada vez que tenía la oportunidad de leer un ratito éste libro me iba gustando cada vez más, ojalas sea una serie del mismo protagonista porque la verdad empatice bastante con él. 📌
📌📌Yo lo recomiendo bastante si te gustan las novelas de intriga. Por eso... 9/10.🌟🌟🌟🌟.