La casa de las capitanas

Es la segunda novela que leo de la autora y de nuevo me ha tenido intrigada haciendo cábalas varias sobre quién es el asesino. En esta ocasión al menos sí que acerté al final.
Un grupo de amigas que hace tiempo que no se ven deciden quedar un fin de semana, pero una de ellas no aparece. Así comienza esta historia que nos mostrará a Julia, una de esas amigas que intentará resolver esta desaparición contra viento y marea.
Otra vez todos los personajes se convierten en sospechosos y otra vez nos encontramos con una trama absorbente y ligera que hace difícil dejar de leer. Varias tramas se irán entrelazando hasta que llegamos a un final lleno de acción y secretos ocultos.
Es verdad que en ocasiones me ha creado algo de confusión al no saber sobre que personaje estaba leyendo al comenzar un capítulo o un párrafo, pero poco a poco me he ido haciendo con la forma de narrar.
La novela trata temas como el maltrato, la salud mental y otras cosas que mejor es que descubráis por vosotros mismos.
Hay momentos un poco peliculeros, es cierto, pero te harán disfrutar y sufrir a partes iguales.
En definitiva, una novela para pasar un buen rato, que es de lo que se trata.

Cuatro antiguas amigas deciden reunirse en una vieja casa del pueblo después de más de diez años sin verse y una de ellas no acude a la cita.... Aquí empieza este thriller que se lee muy rápido y te mantiene todo el tiempo en tensión.

Una investigación que llevará paralelamente a la policía una de las antiguas amigas, irá descubriendo algunas cosas que harán cada vez más turbia está desaparición.

Es una novela ideal para leer en estos días calurosos que decidimos tirarnos en la arena, en la piscina o en el sofá, en fin, que no nos dará un segundo de aburrimiento, y hasta la última página no sabremos el desenlace, todo queda atado bastante bien, así que no temas si vas llegando al final y no te has aclarado aún.