He devorado esta historia en tres noches (haciendo esfuerzos de contención para no leerla del tirón). Me han encantado los personajes principales, cada uno con sus luces y sus sombras, pero juntos hacen un tandem increíble. Hay ternura, diversión y un romance a fuego lento de los que hacen chillar a las románticas empedernidas como una servidora. Me ha encantado que haya escenas con Lina y Aaron, de Farsa de amor a la española, su anterior novela. El único punto negativo es que me ha sobrado la subtrama del hermano de la protagonista, creo que no aporta gran cosa al resto de la historia. |