Stolen Touches: An Arranged Marriage Mafia Romance

—Si en la cabeza de alguien se formara siquiera la más mínima simiente de querer dañar a mi mujer, le partiría la cabeza con mis propias manos como si fuera una puta sandía. A continuación, les sacaría el cerebro enfermo y se lo estrujaría tan fuerte que lo único que quedaría sería papilla.

—Eres una persona excepcionalmente grosera.
—Lo que soy, es desinteresado.
—Desinteresado. —Asiento con la cabeza. Está completamente loco—. ¿Sobre la gente que trabaja para ti, o la gente en general?
—En general. Con una excepción —dice y me dirige esa mirada suya tan enervante—. Tú.