Un romance muy a lo Slytherin, como bien se indica al principio del libro, y yo, como gran amante de esta casa de Hogwarts, no he podido hacer menos que adorarlo.
Ya el inicio del libro es impactante, pues nuestra protagonista, Alessandra Stathos, confiesa que mató a su primer amor. Ya con eso intuimos que no vamos a tener una protagonista al uso, y diría que es eso lo que ha hecho que el libro me guste tanto, lo moralmente grises que con sus personajes y también que sean capaces de cometer verdaderas barbaridades. Y es que más que gris, a veces se inclinan más hacia el negro, pudiendo ser villanos en otra historia, por sus estrategias, actuaciones y lo enrevesados que son.
Alessandra es una joven hermosa, calculadora y manipuladora, utiliza a las personas y las maneja a su antojo, especialmente a los hombres, y tiene todo bien hilado para conseguir lo que quiere, es decir, convertirse en reina, enamorando al rey de las sombras, Kallias, y casarse con él para luego asesinarlo y quedarse ella con el trono. Teniendo en cuenta que tocar al rey se considera delito, y que incluso eso puede ser castigado con la muerte, y que el rey apenas presta atención a las jóvenes que se le acercan, es un plan bastante complicado. Alessandra está acostumbrada a gustar, a que la veneren, admiren y que todo hombre que conoce pierda la cabeza por ella, mientras que ella se limita a usarlos para obtener de ellos lo que quiere, normalmente sexo y dinero, y a veces, contactos, para luego dejarlos, cuando ya no le son útiles. Me ha gustado mucho la personalidad de Alessandra, por su inteligencia y por cómo juega sus cartas, no es capaz de aceptar el fracaso. Eso sí, es muy vanidosa y cree que tiene a todo el mundo a sus pies, por ello disfruté mucho cuando Kallias al principio le da un golpe a su ego, le vino bien. Con respecto a Kallias, me ha parecido un personaje intrigante, y vivir como él vive, desconfiando de todo el mundo y alejando a todas las personas importantes para él tiene que ser durísimo, me he puesto mucho en su situación. De los personajes secundarios, he de decir que los amigos de Kallias me han encantado, algunos son muy cómicos y me ha encantado ver cómo acogen a Alessandra en la corte.
Me ha gustado mucho la manera en la que se ha llevado el misterio de la muerte de los padres de Kallias, es una pregunta que ronda durante toda la lectura e investigaremos el porqué de su asesinato y la identidad de la persona que lo cometió. Además, me ha parecido muy original el tema de las sombras, esas sombras que son parte del rey y cómo le afectan y cómo las controla él, añadiendo el motivo por el cual Kallias impide que lo toquen. Ya es bastante difícil ver elementos originales en libros de fantasía, no me entendáis mal, pero muchas cosas ya están vistas y en los diferentes libros se van aprovechando los elementos de forma diferente, pero en este libro sí que he visto esa originalidad en las sombras, ya que no he leído ningún libro donde tengan ese efecto ni sean tratadas de la manera en la que se hace en esta novela.
El libro no se caracteriza por tener una acción descomunal, aunque haya alguna que otra escena así, pero consigue mantener la tensión y la intriga, tanto por el misterio de las sombras de Kallias, como por el del asesinato de sus padres, además de querer ver cómo avanza la relación y acudir a las interacciones entre los protagonistas y ver si Alessandra conseguirá lo que se propone. Hay mucha tensión en la relación entre ellos, que se ve avivada por el tema de que no puedan tocarse, y esta va creciendo a la par que va aumentando la atracción entre ellos. Se tantean mucho entre ellos, es como un tira y afloja, un baile al que se van amoldando, y en el que Kallias comienza a apreciar a Alessandra y confiar en ella, y Alessandra no se corta en hablar claro al rey y aconsejarlo como mejor puede. Es un libro que transmite muy bien esa intensidad, esa fuerza de las personalidades de los personajes y de los sentimientos que surgen entre ellos.
Enlace:
https://adictaloslibros.blog..