El consentimiento de Vanessa Springora
Los cuentos infantiles son una fuente de sabiduría. Si no, ¿por qué pasarían de una época a otra? [...] Hoy los observo con desconfianza. Entre ellos y yo se ha alzado una pared de vidrio. Sé que pueden ser venenosos. Sé que lo que encierran en sí puede ser tóxico. Llevo muchos años dando vueltas en mi jaula, albergando sueños de asesinato y venganza. Hasta el día en que la solución se presenta ante mis ojos como una evidencia: atrapar al cazador en su propia trampa, encerrarlo en un libro.
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