Susurros de humo y agua de Silvia P. Martín
No todos los seres de Elania tenían poderes mágicos, era un don más habitual en los silfos, aunque había algunas excepciones.
|
Susurros de humo y agua de Silvia P. Martín
No todos los seres de Elania tenían poderes mágicos, era un don más habitual en los silfos, aunque había algunas excepciones.
|
Susurros de humo y agua de Silvia P. Martín
Artur tenía razón. Sin duda, la noche había sido especial.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
A veces es más seguro aparentar que no tienes nada que perder.
|
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
La humanidad ha avanzado tanto en los últimos siglos que la tecnología ha neutralizado esa calidez que tenían las casas, esa por la que se denominaban hogar.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Al final, todo siempre era una lucha de poder; quién dominaba más y quién tenía más influencia.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Es esa dichosa tecnología [...]. Cuanto más avanza, menos espacio hay para el ser humano.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
NORMAS DE LA CASA Uno. Relájese para no interferir en las ondas cerebrales. Dos. Intente dejar la mente en blanco para no alterar la experiencia con imágenes del presente. Tres. Si quiere salir de la experiencia, la palabra de seguridad es insomnium. Cuatro. Recuerde que todo es solo una ilusión, nada es real. Que tenga un dulce sueño. Atentamente, Otto Meriheder. |
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Pues, tal y como decimos por aquí, que tenga un dulce sueño.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
El destino siempre nos coloca exactamente en el lugar en el que debemos estar.
|
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Si un infarto era su destino, quizá llegara más pronto de lo que pensaba.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
La tecnología ha hecho que podamos hacer los sueños realidad, como esa frase tan manida de nuestros antepasados.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Kawachi se unió al aplauso sincero, alegrándose porque aún existieran emociones verdaderas en aquel mundo de hipocresía.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
Vivir y sobrevivir en la nueva era de la raza humana eran conceptos cada vez más alejados. Los Rem vivían. Los Norrem sobrevivían. Así eran las cosas.
|
Casa de sueño y pesadilla de Silvia P. Martín
—Hay que agradecer cada año que pasamos en este mundo. —Cada año que sobrevivimos en este mundo, querrás decir. |
|
Silvia P. Martín
Es durante el sueño cuando el ser humano alcanza la verdadera belleza de su especie.
|
Silvia P. Martín
Supongo que era como un canario, una mascota que no hacía gran cosa pero que te acordabas al oírla cantar.
|
48 horas antes de ser un zombi de Silvia P. Martín
Mi carne se hundió, vencida por esos dientes que me cambiarían la vida en un instante.
|
¿Cómo se llaman los cereales de la fábrica donde están Amelia y los demás?