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La idea natural: 120 de María Negroni
la poesía es un jardín, un jardín que habla de otros jardines.
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La idea natural: 120 de María Negroni
sólo sabemos en la medida en que vivimos. El mundo, esa sombra del alma que se extiende alrededor, no es más que la cantera de la que extraemos las piedras para la construcción. La vida es nuestro diccionario.
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La idea natural: 120 de María Negroni
Hay ideas difíciles de formular (y comprender) que sólo en el arte pueden hallar espacio para existir.
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La idea natural: 120 de María Negroni
El objetivo es encontrar la conexión oculta entre las cosas. El corolario: si todo está conectado, también debería estarlo la relación entre el fenómeno y quien observa. ¡Los experimentos son, en parte, sobre uno mismo!
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La idea natural: 120 de María Negroni
la hibridez es algo incómodo no concita adhesiones, se parece mucho al estado mental de la pregunta.
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La idea natural: 120 de María Negroni
Sólo hay dos inviernos, piensa. Un invierno blanco y un invierno verde. En el invierno blanco, todo está muerto. En el verde, todo está por morir. |
La idea natural: 120 de María Negroni
No se trata, al menos no del todo, de buscar explicaciones a las cosas. Está en juego un deseo muchísimo más arduo el de alumbrar un poema donde la ciencia cante.
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La idea natural: 120 de María Negroni
quisiera vivir como los indios Puri, de los cuales se dice que cuentan con una sola palabra para decir ayer, hoy y mañana.
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El corazón del daño de María Negroni
Te oí literalmente dejar de respirar, Madre. Te vi partir dejando un cráter en el lugar del mundo. Estaba y no estaba preparada. ¿Para qué? Para el alivio, el vacío, el horror de no sentir. Ya no habrá reparación. |
El corazón del daño de María Negroni
Mi madre: la ocupación más ferviente y más dañina de mi vida. Nunca amaré a nadie como a ella. Nunca sabré por qué mi vida no es mi vida sino un contrapunto de la suya, por qué nada de lo que hago le alcanza. |
El corazón del daño de María Negroni
Más probable es que la vida y la literatura, siendo ambas insuficientes, alumbren a veces —como una linterna mágica— la textura y el espesor de las cosas, la asombrada complejidad que somos. Es lo que busqué, Madre. Darte, como en el Apocalipsis, un libro a comer. |
El corazón del daño de María Negroni
Un libro es un cementerio hermoso. También es una máquina de pensar, un dispositivo que encarna el más alto espíritu de contracción
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El corazón del daño de María Negroni
La poesía, lo entenderé después, no tiene interés en temas ni en personajes. No cuenta historias. No inventa mundos. En el ruido de hoy, da a escuchar un silencio
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El corazón del daño de María Negroni
A lo mejor los libros son también eso: un viaje a la transparencia
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El corazón del daño de María Negroni
El oído de afina en el encierro; lo que le pedimos al texto también
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El corazón del daño de María Negroni
No existe más fidelidad a los hechos que equivocar el rumbo o divagar
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En la historieta, una viñeta es un recuadro delimitado por líneas que representa un instante de la historia.