Desde el inicio y mas allá de la mitad me mantuvo enganchada, pero en la última parte el final se torna no de terror sino desagradable por ocasiones, quizás ese era el propósito que perseguía el autor, pero me decepcionó igualmente. Es quizás la pesadilla de todo padre, que el hijo amado desaparezca dejando un vacío imposible de llenar a pesar de los años y en esta ocasión el autor se valió de este recurso para crear un ambiente sombrío y angustiante que va desestabilizando emocionalmente a los protagonistas, quienes quieren creer o tienen la esperanza que Naomi aún está presente en sus vidas, así sea en otro plano... pero lo está realmente? o todo es fruto de una mente enferma en cuyos sentidos no puede fiarse completamente? |