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Arde este libro de Fernando Marías
No comprendo cómo pudimos llegar hasta este punto. La decadencia que te arrastra en el pasado se vuelve inverosímil cuando la contemplas desde la perspectiva del tiempo transcurrido.
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Arde este libro de Fernando Marías
No es fácil poseer el secreto de la felicidad sencilla. Todas esas veces que he pensado en abandonar este libro porque contiene demasiadas oscuridades de alguien que no tiene derecho a réplica, he recordado en el acto tu felicidad sencilla, y ahí hallaba la razón para continuar. Si una persona amada pierde su felicidad interior hay que preguntarse por qué. Perder la felicidad es el asunto más serio del mundo, aun más serio que encontrarla. Indagar, cuando esa persona nos importa, es un acto de justicia y de amor.
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Arde este libro de Fernando Marías
Libro sarcófago. ¿Para albergar a tu espectro o para que halle refugio el mío?
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Arde este libro de Fernando Marías
Te incineraron con una novela mía entre las manos. Por eso escribo este libro. Hasta ese momento jamás pensé que contaría nuestra historia. Había logrado asumir el largo camino de tu final, que a veces, no sé si atreverme a decirlo, tanto deseaba que llegara, y describir aquel calvario que por encima de todo fue tuyo me habría parecido una herejía. Pero entonces supe que te incineraron con la novela entre las manos y ahí, sin retorno ni piedad, nació este libro. Yo rememorando y tú muerta. Jamás podríamos habernos figurado el día del primer abrazo que desembocaríamos tanto tiempo después en este diálogo.
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Prisioneros de Zenda de Fernando Marías
Porque gracias a él viví, tras caer al abismo setenta y cuatro años atrás, la más extraordinaria aventura que puede vivir un ser humano: perder de un solo golpe el nefasto equipaje de la areogancia y del prejuicio.
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Prisioneros de Zenda de Fernando Marías
¡Hay que yacer así, quebrado el cuerpo y devastada el alma, para conocer la verdadera soledad y el verdadero miedo!
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Fernando Marías
¿Por qué no haces el mismo circo, tú y tus amigos de esa tele sensacionalista, poniendo también motes a los hombres que asesinan a sus parejas cada semana? No sé... El caso del fontanero loco, El caso del abogado letal, El caso del ca,arero iracundo, El caso del camionero del amanecer...
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Como tú: 20 relatos 20 ilustraciones por la igualdad de Fernando Marías
Diane adelantó su pie y la humanidad dio el primer paso.
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Como tú: 20 relatos 20 ilustraciones por la igualdad de Fernando Marías
Quizá me encuentre en Tánger, quizá en Marsella, quizá en Beirut, pero siempre llevaré la cara descubierta para mirar a los hombres con los mismos ojos con los que ellos me miran a mí. Antonio Lozano |
Como tú: 20 relatos 20 ilustraciones por la igualdad de Fernando Marías
Había cumplido su sueño de ser profesora de física, pero en los últimos tiempos estaba tan débil por no comer que necesitaba un micrófono para dar clases y que se escuchase su voz. María Zaragoza |
Zara y el librero de Bagdad de Fernando Marías
Desde hace unos meses, alguna gente del barrio llama a Waleed «El Espía». El mote se lo puso el dueño del bar de abajo, un mesonero para quien cualquier iraquí que viva en España solo puede dedicarse a espiar para la causa árabe.
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cual era el apodo que le puso la prima de luke