Me encanta cómo escribe Víctor del Arbol, esta novela me descolocó un poco al inicio, ya que me esperaba algo del estilo a sus otras novelas que he leido, historias con algo de intriga, pero nada que ver, está novela hay que paladearla y leerla poco a poco. Es una novela dura, con historias entremezcladas de varios personajes, sobre vidas truncadas, deseos insatisfechos y errores del pasado, trata varios temas por ejemplo: el maltrato, la prostitución, la enfermedad...pero no le sobra nada. La trama de la novela comienza cuando Miguel y Helena se conocen en una residencia de ancianos en Tarifa, y tras la muerte de un compañero, deciden hacer un viaje que será un viaje inolvidable. Por otro lado, Yasmina vive en Malmo, con su madre y su abuelo que emigraron a esa ciudad desde Tanger antes de nacer ella. Su madre y su abuelo se averguenza de ella porque trabaja para Sture, un sueco con negocios turbios, al que llaman El Turco. Los personajes están muy bien perfilados, sobre todo, he odiado a Sture, Govan, Abdul y la mujer de Sture, Rachel. En general, me ha parecido una novela triste y me ha dejado un poso de melancolía. |