Renuncia a los sentimientos tumultosos, destructores imperceptibles de nuestro ser; ven a aprender a conocer los placeres inocentes y durables
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Renuncia a los sentimientos tumultosos, destructores imperceptibles de nuestro ser; ven a aprender a conocer los placeres inocentes y durables
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No es al simulacro de la virtud que rindo honenaje, es a la virtud misma. La tomo siempre por juez y guía de mis acciones
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Coraje, firmeza, ¿son entonces crímenes cuando la ocasión lo quiere?
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Aprendí de los españoles a conocer las desgracias; pero el último de sus golpes fue el más sensible.
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La amistad, ese sabio y dulce vínculo, debería quizás llenar todos nuestros deseos; pero comparte sin crimen y sin escrúpulo su afección entre muchos objetos; el amor que da y que exige una preferencia exclusiva, nos presenta una idea más elevada.
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(El esposo) está autorizado a castigar rigurosamente la apariencia de una ligera infidelidad librándose sin verguenza a todas las que el libertinaje le sugiere. En fin, parece que en Francia los mazos del matrimonio sóll sin recíprocos al momento de la celebración, y que después sólo las mujeres deben estar sometidas.
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(Un marido) sin temor puede disipar en prodigalidades tan criminales como excesivas no solamente su bien, el de sus hijos, sino inckuwo de la víctima (su esposa)
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Sólo entienden por la palabra bondad la cimpasión nstural que sentimos ante un ser sufriendo; e incluso he notado que son más afectadas por animales que por humanos.
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El tiempo más precioso para formar el espíritu se emplea en adquirir talentos imperfectoa, de los cuales se hace poco uso en la juventud, y que se vuelven ridículos a una edad avanzada
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La educación que se les da (a las mujeres) es tan opuesta al fin que se propone, que me parece ser la obra maestra de la inconsecuencia francesa
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¿Cuál de los siguientes libros fue escrito por Gustave Flaubert?