"...justo yo que debía de saber que los libros solo sirven para unir por encima del propio aliento a las personas y protegerlas así de la oposición inexorable a la que se enfrenta toda existencia: su naturaleza efímera y el olvido." Si tenía dudas (no) de que Zweig fue maravilloso, este fue el relato definitivo para acabar de enamorarme. Cada una de sus novelas, de temas y en entornos distintos, nos abren los ojos a diferentes realidades, y no hay nada como verte reflejada en el buen Mendel, absorto en sus libros, para empatizar con este personaje, porque todos hemos buscado algo en lo que abstraernos del mundo, y hacerlo de la mano de un libro me parece la forma más bonita de evasión. |