Acabo de terminarlo y, aún con lágrimas en los ojos, escribo esta pequeña reseña. Ha sido un libro duro. He tenido que parar en varias ocasiones porque no me encontraba con la suficiente fuerza mental para leerlo. Es una historia cruda, tan sumamente bien narrada que parece de real. La autora te mete en el mundo de Jude y sus amigos con una intensidad y una facilidad tremenda. Creo que después de cientos de libros leídos, puedo decir que tengo mi libro favorito del mundo |