La casa al final de Needless Street

Mi primera toma de contacto con Catriona Ward y me ha dejado con muchas ganas de más. Normalmente no soy muy fan de los narradores no fiables, pero en esta novela me ha parecido que está todo tan bien hilado que era necesario ir a ciegas hasta casi el final.
Todo empieza en el lago con la desaparición de una niña. A partir de ese día y de que Ted haya sido interrogado por ese suceso, empieza a recluirse en su casa junto a su gata Olivia y su hija Lauren. Conoceremos su día y a día y la relación que se da entre ellos alternando capítulos con el punto de vista de cada personaje.
No puedo especificar mucho más, solo que estuve perdida la mayoría del tiempo, porque no entendía que un gato tuviera voz en la narración. Creo que de todos los capítulos, los de Olivia eran los más extraños, los que más me costaba encajar y los que hacian que maquinara mil teorías en mi cabeza.
Les puedo jurar, que algunas de las teorías las acerté, pero ni por asomo resolví todo lo que vino después y me dejó a cuadros.
En las últimas páginas dejé de tener la sensación que estaba leyendo terror y de repente me encontré con una historia que me caló profundamente y me hizo llorar mucho.
Les recomiendo que se lean el epílogo que viene al final y en el que la autora cuenta cómo y en qué se inspiró para crear esta novela, que aunque le haya dado 3 estrellas y media, se ha convertido en algo difícil de olvidar.