La crueldad de estos cuentos, en la época actual, reside en la dificultad para leerlos sin sentir que se pierde un algo inasible. Cierto que hay algunos muy interesantes, aunque muchos de ellos remiten a literaturas tanto anteriores como posteriores, el estilo grandilocuente de Villiers aporta otra dimensión a esa crueldad. Algunos son tan cortos que ahí también hay crueldad, en la sensación de historia inacabada, otros se extienden un poco más de lo necesario, En fin desde el convidado de piedra, el vampirismo, la literatura sobre mujeres de Poe ( Ligeia, Morella, etc...) la mascara de la muerte roja, alguna que otra “androidada” discurren por estas páginas que se leen despacio sin prisas a riesgo de quedar con la pregunta ¿ de que me perdí? Rebotando en la cabeza. Si no estás dispuesto a entregarle tu tiempo y parte de tu alma a este Conde...estas conde...nado a no leer o no comprender del todo . El “ creador” de la palabra androide me ha convertido uno, pero olvido ponerme corazón. + Leer más |