Sadie

Su hermana pequeña, Mattie, está muerta y Sadie está decidida a cazar al hombre que sabe que es responsable de su muerte. La policía arruinó la investigación original, por lo que Sadie toma las escasas pistas que quedaron atrás, desaparece de la sociedad y emprende su propio viaje por la justicia. Es un camino largo y sinuoso hasta este hombre, y ella está dispuesta a cruzar cualquier línea necesaria para llegar a él, volviéndose cada vez más imprudente a medida que se acerca más y más a encontrarlo. Varios meses después, West McCray se topa con la historia de Sadie y queda atrapado en la vida de esta chica desaparecida en busca de venganza. Comenzando su propio podcast para la historia, McCray sigue el rastro que Sadie dejó a su paso, con la esperanza de descubrir qué sucedió y encontrarla antes de que sea demasiado tarde. El acercamiento entre la voz de radio independiente de McCray y el apasionado relato de primera mano de Sadie funciona muy bien. La autora hace un buen trabajo al omitir detalles dentro de los capítulos de Sadie que luego se descubren y revelan dentro de la investigación de McCray, lo que te mantiene constantemente enganchada. Y todo el tiempo, le ruegas a McCray que avance más rápido, que junte las piezas más rápido, en la remota posibilidad de que alcance a Sadie a tiempo.

En general, esto se siente como una historia sobre todas las jóvenes que son continuamente defraudadas por las personas que deberían haberlas protegido. Esperaba que el final fuera de dos maneras, pero no fue así, así que no estaba preparado en lo más mínima. Y era extremadamente realista, haciéndolo mucho peor.

Hay bastante más que quiero decir, pero no sin permitir que se filtren posibles spoilers. Solo sé que este libro será uno de esos que se quedarán conmigo. Puede que se desvanezca en los rincones de mi mente por un tiempo, pero algo al azar me hará recordar, y todo el dolor y la ira de esta historia volverán al primer plano una y otra vez.