Almendra

Me tomo casi tres meses leer este libro, aunque se trata de uno de los títulos bastante corto. al principio le tuve un montón de expectativas, y a medida avanzaba la trama crei que todo el hype de tiktok y bookstagram en torno a esta obra estaba justificado, sumado tambien a que era mi primera vez leyendo a la autora. Pero al terminar, me sentí bastante defraudada al puntuar con solo tres estrellas a “Almendra”, de Won Pyung Sohn... y esta es la razón.

Nos adentramos en la historia de Yunjae, un adolescente que lidia con la extraña condición de Alexitimia (Pues las amígdalas de su cerebro no son del tamaño adecuado), lo que le impide desenvolverse en un mundo rodeado de sentimientos y emociones que es incapaz de entender, y mucho menos compartir.

Durante toda su vida las únicas personas que logran comprenderlo son su madre y su abuela, que con paciencia le hablan de alegría, tristeza, enojo y amor, en un intento didáctico que pretende acercarlo más a los demás seres humanos por su cuenta. Plan que funciona hasta el cumpleaños número 17 de Yunjae, cuando un hombre psicótico casi asesina a sangre fría en medio de una multitud, a las únicas dos personas que significaban algo para su vida, dejándolo solo en el mundo. A partir de entones Yunjae deberá aprender a entender su nueva vida de soledad en un mundo que no lo comprende.
¿Qué hará entonces? Deberá esforzarse el máximo en no destacar demasiado, e intentar entender cuál es su objetivo de vida, aunque no pueda sentirlo.

Dentro de los aspectos positivos rescato que la historia está narrada con una prosa bastante fácil de comprender. Dentro de la premisa sencilla y algo intensa que se nos promete en la sinopsis, logramos conocer el interior de la mente de Yunjae como primer narrador, quien está familiarizado con su condición y no ansia formar parte del resto de la sociedad aun después de la tragedia que golpea su vida de pronto. Yunjae es un chico curioso y reservado, que pasa demasiado tiempo dentro de su cabeza, y prefiere la soledad a compartir sus ideas con quienes se acercan para querer ayudarlo. Mas son pequeñas situaciones que a simple vista aparentan ser inconexas las que realmente lo forzaran a integrarse al mundo que insiste en dejarlo de lado, como su extraña amistad con el bravucón Goni, y el seguir haciéndose cargo de la librería de su madre, aun cuando ella está en coma.

Ahora viéndolo desde otro enfoque, como me demore bastante tiempo entre capitulo y capitulo (Por motivos personales claro está), en ocasiones perdía el hilo de los acontecimientos y debía retroceder una cuantas paginas antes de retomar la lectura. Había momentos en los que solo dejaba de leer porque la historia se me hacía algo aburrida y lenta, como si girase sobre si misma o no tuviera mucho de dónde agarrar para seguir avanzando, aspecto que me decepciono un poco. Algunas decisiones de Yunjae me parecieron absurdas, más allá de sus grandes reflexiones de vida. Los demás personajes me resultaron algo extraños también, pero creo que son impresiones mías nada más. Y justo cuando empezaba a interesarme más en toda la historia de Yunjae, y el conflicto me resultaba tan atractivo para querer pasar de página… se acaba. Así de simple.

No entiendo si yo lo interprete todo mal y no entendí el meollo del asunto, pero el final me pareció tan brusco que incluso ahora no acabo de creérmelo. Y ni hablar del epilogo, que me pareció un tanto rebuscado (Sin ofender a nadie a quien le haya resultado conmovedor, como me parece era la intención original). Yo esperaba saber que pasaba a continuación y me quede con un fin cortado a la mitad y la mente en blanco, y detesto esa clase de finales a medias, sin ningún tipo de justificación.