El imperio de las tormentas

Si crees que tendrás éxito, siempre existirá la posibilidad de que lo tengas. Pero si das por sentado que fracasarás, entonces siempre fracasarás. Nunca des por perdida la partida antes de jugar.

-[...] Así son en la parte alta. Los hombres trabajan, las mujeres se comportan como si estuvieran indefensas. Un montón de estiércol. Abajo, en el centro, todo el mundo tiene que esforzarse. Una mujer hace lo que quiere y el hombre debe respetarla por ello.

-¿Y tu no crees que me sentí como una idiota? Así te sientes siempre que haces algo nuevo y osado. Te sientes tan falsa como una puta en una iglesia.
-¿Y cómo dejas de sentirte así?
-Al principio no es posible. Te sientes falsa, pero sigues adelante de todos modos. Sin embargo, si insistes el tiempo suficiente, dejas de sentirte falsa porque ya no lo eres.

No lamentes tanto lo perdido que te impida ver lo que has ganado.

Cuando la juventud y la inocencia dan paso a la experiencia, la duda enturbia la mente. Quienes hallen un propósito renovado en la complejidad prosperarán en lugar de fracasar.