Hechizo

Hechizo es una historia que sigue los pasos de la pequeña Mercy quien vive una vida muy monótona junto a su pequeña hermana Charity, su padre Trajan, el ama de llaves Aurelia y la severa institutriz Galatea, todos son parte de la misma familia Berga pero al ser de menor rango tanto Aurelia como Galatea están destinadas a actuar como sirvientas.

Los días pasan o mejor dicho las noches, puesto que la vida de la casa transcurre durante las largas noches de invierno, hasta que un día esa monotoneidad se ve alterada por una pequeña flor, una campanilla de invierno, que fue el comienzo de una avalancha de recuerdos, dudas e inquietudes. Tan solo esta pequeña flor, abrió la puerta al pasado, a los recuerdos… recuerdos que no poseía. Mercy ya no recordaba en que día o en qué año estaban, no podía recordad el verano, el calor del sol, ni siquiera a su madre.

En medio de toda esta confusión hace aparición un nuevo personaje, Claudius, quien confiesa ser el que ha dejado la flor en la almohada de la niña, para que recordara, para que desvelara los misterios que se ocultan en Century.

La historia en sí tiene dos comienzos, un prólogo donde un grupo de personas están renovando una antigua casa luego de llevar cerrada mucho tiempo, en el desván encuentran un antiguo libro rojo con las hojas amarillas y desgastadas. Era una novela, a simple vista parecía una novela romántica, llamada Century.

El segundo comienzo es justamente la lectura de este libro rojo: Century, cien años de hechizo. Una novela por Mercy Galliena Berga 1890. Esta novela empieza diciendo:


Una mujer bajo el hielo.

Un fantasma. Mercy podía ver fantasmas, los ecos de personas que habían muerto. Los muertos se trasladaban a otro mundo, al cielo tal vez o al Valhalla si uno era vikingo; pero en ocasiones dejaban atrás hilillos de sí mismos, igual que un pedazo de tela rasgada de un vestido o cabellos atrapados en un clavo. Sólo que, claro, los fantasmas eran incorpóreos, y en ellos, los ganchos eran los lugares a los que se aferraban, en los que les habían sucedido cosas importantes. A lo mejor, se decía Mercy, ni siquiera era necesario estar muerto para dejar una imagen. Puede que incluso ella misma ya hubiera dejado alguna.




Lo cual pone de manifiesto que Mercy es una niña muy especial, puesto que puede ver fantasmas o algo similar, a medida que transcurre la historia vamos conociendo a cada uno de esos fantasmas, que son algo más que espíritus atrapados en este mundo.


A partir del encuentro de la niña con Claudius vamos entreviendo que es lo que está sucediendo, que es lo que permanece oculto en esas eternas noches de invierno. Y así vemos también como un don puede ser una maldición, como un sueño puede convertirse en pesadilla. Pero al mismo tiempo vemos como a pesar de las situaciones que nos toca vivir hay que seguir adelante.

Mercy es un personaje encantador, con mucha fuerza e inocencia, como está atrapada sin saber qué camino tomar cuando se le presentan varias opciones, porque no sabe cuál es el mejor. Nos confundimos a su lado, nos entristecemos y nos alegramos junto a ella, viviendo cada experiencia que le toca afrontar.

Es un excelente libro porque va más allá de una simple historia que aparenta ser de fantasmas, abarca muchas cosas y sentimientos que si los nombro, le estaría quitando parte de la magia de ir descubriéndolos página a página de esta historia.

Es un viaje al pasado, un camino para recuperar no solo los recuerdos perdidos, sino también un futuro que ha quedado olvidado.