Dos vidas para Lydia

Cuando supe que la autora de "Un día de diciembre" sacaba nuevo libro no lo dudé, necesitaba leerlo, aunque tengo que decir que no me esperaba la historia con la que me he encontrado.
La historia comienza de una manera muy triste, y durante las siguientes páginas acompañaremos a Lydia en su duelo, su tristeza, sus ganas de nada.
Su vida da un vuelco cuando Freddie, su alma gemela y su pareja desde hace más de diez años, muere, es ahí donde comienza su historia.
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He sufrido mucho durante los primeros capitulos de una historia que te encoge el corazón porque es imposible no empatizar con Lydia. La autora ha conseguido transmitir esos sentimientos de una manera increíble, pero (y precisamente por eso) me ha costado mucho avanzar en una lectura con una importante carga narrativa y pocos diálogos.
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Una vez superada esta parte, con la ayuda de su familia y amigos (secundarios de lujo), Lydia decide abrirse de nuevo al mundo, y avanzar, renacer de las cenizas, decidir en qué mundo quiere vivir.
He echado en falta el epílogo (es curioso que la primera novela de la autora tampoco tenía epílogo, y también lo eché de menos en su momento), después del largo y tortuoso camino recorrido, el final se me ha quedado corto y me hubiera gustado saber más.