Dos vidas para Lydia

No siempre es fácil aceptar las cosas que no puedes cambiar.

Lo que pasó ayer, o la semana pasada o hace diez años... Esas cosas no importan. Lo que importa de verdad es el aquí y el ahora, hoy, mañana, el año que viene. Algunas personas se enamoran a primera vista y siguen juntas para siempre; otras se casan con su amor de la infancia y terminan en el juzgado divorciándose. La vida es impredecible, solo puedes intentar sacar el máximo partido a lo que te vaya plantando delante.

Tú y yo somos en todo tiempo, somos siempre y somos en todas partes. Si vivo un millón de vidas, te encontraré en todas ellas.

"El duelo es una cosa extraña. Es mío, y nadie puede pasarlo por mí, pero entre bambalinas ha habido un elenco de actores secundarios apoyándome en silencio".

Al final el tiempo lo cambia todo, y ahora me he dado cuenta de que no importa, porque lo que tenemos es más que solo aquí o solo ahora. Tú y yo somos en todo tiempo, somos siempre y somos en todas partes. Si vivo un millón de vidas, te encontraré en todas ellas.

Tu vida continúa siendo tu vida, Lydia. Sigues aquí respirando, por muy inoportuno que te parezca, viendo cómo se pone el sol y sale la luna con independencia de que tú creas que es una desfachatez que saque a relucir su brillante carita todos los puñeteros días.

...me pregunto por qué nos enamoramos de unas personas y no de otras, aun cuando nos gustaría hacerlo. Miles de millones de humanos, todos correteando por el planeta, enamorándonos y desenamorándonos unos de otros sin ninguna razón que la lógica, los números o el sentido común puedan explicar. Qué incomprensiblemente raros somos.

Cada uno crea su propia suerte

Es mejor haber amado y perdido que nunca haber amado.
fragmento de poema de Tennyson