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Si habéis leído "Azami" u "Hôzuki", seguro que conocéis a Gorô, el protagonista de este libro; en ellos era un personaje secundario. Aquí, en este libro, lo vamos a conocer a fondo. Gorô es un personaje detestable: machista, vanidoso, desleal, prepotente, envidioso... aunque al final descubrimos lo que hay tras su arrogancia, vemos cómo es y por qué actúa como lo hace. Está casado, tiene dos hijos adolescentes, tiene dos amantes y se jacta de tenerlas satisfechas; presume de tener éxito y siempre se rodea de importantes clientes en bares y fiestas. Esta convencido de que es el mejor presidente que puede tener la empresa familiar, solo por ser hijo de su padre y heredar el cargo. Tiene planes para el futuro de toda la familia, sin pensar ni tener en cuenta lo que los demás quieren. al final, se topará con la realidad y tendrá que replantearse todas las cosas que da por sentadas, caerá el personaje que aparentaba ser y quedará el que realmente es. Esta historia reflexiona sobre cómo las heridas de la infancia influyen en el resto de la vida personal y profesional. A la vez, es un retrato de la sociedad japonesa, de la estructura machista en la que se levanta, una sociedad moderna para unas cosas y, a la vez, anclada en el pasado para otras. Una historia que he disfrutado a pesar de un protagonista desagradable. Y es que las apariencias engañan. |
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