¡Pero qué cuento tan fabuloso! Mira que ya había leído unos cuantos relatos y novelas de este autor que me gusta mucho y este se me había despistado por ahí sin conocerlo. Ha sido una experiencia deliciosa. Mientras leía y acompañaba a estos gatos por su periplo para ayudar a Zobras a cumplir su promesa, no se me ha descolgado la sonrisa de la cara, llegando a soltar alguna carcajada en algún momento. Es un cuento apto para cualquier edad; es tan blanco, tan ingenuo y tan instructivo para leerlo a nuestros peques y disfrutarlo nosotros también, que la experiencia de lectura será la misma en todos: calentar nuestros corazones. Es un cuento que habla de lealtad, de promesas, de amistad, de familia que no es de sangre, de no sentirse diferente cuando se es diferente y para el resto, convivir con normalidad con lo diferente. Pero sobre todo es un libro que habla de lo mal que los humanos podemos llegar a gestionar nuestro entorno y de cómo al final nos afecta a nosotros mismos. Luis Sepúlveda siempre fue un defensor de la naturaleza, de la convivencia equilibrada entre humanos y la madre Natura, de hecho en todos sus libros está presente el tema . Y este libro fue escrito después de haberles prometido a sus hijos una historia sobre animales y ecología. ¿Recomendaría este libro? Sí, sin duda alguna. Un maravilloso cuento que os dejará un buen rollo impresionante. |