La vida invisible de Addie Larue

Un camino transitado con clase, sin importar lo largo y azaroso que pueda resultar.

Te puede llevar trescientos años, Diez , Uno, o una semana. Desplazarte sobre el, en la construcción del mismo, en la escritura o la lectura.

Addie Laurie niña fuera de su tiempo, se niega a contraer matrimonio a los 14 años( estamos hablando de 1700 , en Francia) y establece un pacto con un Dios de la noche, lo cual le proporciona libertad y longevidad, pero como todo trato, nadie da nada por nada, nada es gratis, conlleva una maldición, la incapacidad de ser recordada, o dejar huella de su presencia. A partir de este hecho, debe pasar por todo tipo de vicisitudes, no exenta de privilegios, pero no parecen compensar, ( en realidad a los humanos siempre nos parece que se nos queda debiendo. ) y es atosigada por su demonio particular Luc para que claudique.

En este tenor continúa la historia hasta llegar al Nueva York de 2014. Tras haber vivido intensamente al igual que padecido dolorosamente. El resto aunque menos sufrimiento corporal no le resultará más fácil que lo 300 años previos.

Lo más importante , aquí existe clase, en el tema,el mítico tema fáustico, cualquier trato con lo incognoscible, el resultado no siempre alentador, la carga emocional, el peso del tiempo, más importante que el paso del mismo. El rechazo al determinismo, la búsqueda del albedrío. El saber que toda toma de decisión puede resultar en el camino a la perdición.

En el trato del mismo, en los saltos temporales, en la cortedad, la concatenación de los capítulos, en la persistencia del olvido, recordatorio de lo voluble, inasible y traicionera que puede ser la memoria, y el inefable hecho de que la historia se escribe hacia adelante pero se lee hacia atrás, a cada segundo.

Un trato cortes a un pacto de caballeros. No por lo que narra la historia, por el respeto que, a veces forzadamente priva en el. Un privilegio de la semántica y el valor de la semántica a lo largo y ancho de la novela, tanto por parte de Schwab como de los personajes( merito de la autora)

Existe clase en los diálogos, en los personajes, en el ambiente; pero lo existe también en la descripción de situaciones que suelen carecer de ella en el grueso de la literatura. Las escenas románticas son respetadas y no resultan melosas,tiernas si. En las escenas eróticas, que no abundan, pero no son pocas, ni recargadas, excesivas o facilonas.

Existe clase en la creación de mundos: a modo para la protagonista, pero guiada por la presencia impalpable de la misma. La ruta que marca la constelación de pecas, para guiar a los “navegantes” que una y otra vez se pierden en su vida, la senda del artista… de los artistas que plasman ese atisbo de Addie bajo diferentes circunstancias, en diferente épocas de su “no/ si vida” una cartografía llevada de la mano de hechos históricos, en la vida de todos( guerras) música, literatura, ópera , gastronomía vino ( recordé ; “ el Zorro y el Bosque “, de Bradbury) etc. Que enhebran el hilo de su devenir , largo devenir por la tierra. La visión de las contrapartes, Luc , Addie, con Henry atrapado( literalmente en el medio. Addie un lienzo sobre el cual reescribir mil historias, “ un libro no se escribe solo”

Schwab reconocida creadora de mundos se anota un punto más con este, el mundo de una condenada, un maldito y muchos ingenuos que tratan de ignorar que para obtener hay que pagar.

Esta novela me pone a pensar en las múltiples referencias producto de una buena investigación, una larga imaginación, una extensa fantasía, podría equipararla con muchas otras obras, pero me quedo con tres por la fuerza que le aportan a la historia “ Tristan e Isolda” ( leyéndola ahora mismo) Bethoven y su “ es preciso”, y la aproximación Shakesperiana. El simbolismo de las pecas que constelan la cara de Addie,

Me remite también a otro tipo de referencias, entre las que mencionaré sólo la condición médica de Brad Pitt -Prosopagnosia- incapacidad para recordar rostros. Maldición aparejada al trato otorgado por Luc a Addie. Pero a la inversa, al ser imposible de ser recordada por nadie hasta que conoce a Henry.

Míticamente puedo referir las múltiples implicaciones del libro, desde la negativa de Addie a vivir una vida que no es vivida, la búsqueda de escape, mucho feminismo , no recalcitrante, el pacto con Luc, libre albedrío contra determinismo. La ausencia de amor en las relaciones carnales, la incapacidad de los seres humanos para aceptar el destino final, la muerte, y el peso que en la vida implica el sentido de no pertenencia. El entregar todo por amor… o al menos creerlo, en resumen la necesidad de fe . Solo me ha resultado pesado el cierre de la misma, el último capítulo lo sentí iterativo y por ende innecesario… ya eran demasiados “ siempre te recordaré”

Eso es un poco de lo mucho que gratamente me ha otorgado esta Novela de Schwab, a quien le tenía respeto por “ una magia más oscura” y aversión por sus largas zagas, ademas de incredulidad por “ La bruja de Near.
Con esta novela me ha conquistado,por la vuelta de tuerca que imprime a los ya mentados temas. Inmortalidad, pactos con lo desconocido, libre albedrío, pero sobre todo por el acertado hecho de colocar una protagonista femenina en el rol principal. Y desde ya que para mi Luc y Addie se convierten en una pareja inmortal….Claro,eso son. .