Entre los muertos

Todo comienza cuando Kerman Sanginés, un conocido forense que engaña a su esposa con la agente de la ertzaintza Nerea Arruti, sufre un accidente de coche después de haber pasado el fin de semana con su amante. En el vehículo viajan los dos, no tienen heridas graves pero nadie puede verlos juntos, así que, tras recoger sus cosas Nerea sale del coche para alejarse del lugar mientras Kerman llama a los servicios de emergencias.

Cuando al día siguiente Nerea llega a la comisaría se entera de que Kerman ha fallecido, el coche ardió y él estaba en el interior, pero no se lo termina de creer ya que vio a Kerman hablar por teléfono pero ¿si no fue con los servicios de emergía, con quién estuvo hablando?

A partir de aquí Nerea empezara a investigar por su cuenta y riesgo hasta llegar a relacionar la muerte de Kerman con la de un joven que falleció en trágicas circunstancias y a quien Kerman realizó la autopsia. Ambas muertes nos llevarán de la mano en una investigación en la que todo el mundo tiene secretos que ocultar, el pasado saldrá a la luz y donde un personaje misterioso conocido como Cuervo aparece como una sombra a lo largo de las páginas.

De nuevo la acción se desarrolla en el pueblo imaginario de Illumbe y las descripciones nos trasportan al Cantábrico, con ese mar que unas veces es calmado y otras salvaje en las que las olas destrozan la costa. La trama se irá desarrollando de menos a más y los diálogos, así como la dosificación de intriga, harán que las páginas vuelen sin darnos mucha cuenta.

Pese al comienzo que deja al lector con la duda de qué le ha pasado realmente a Kerman y, pese a gustarme cómo lleva el autor la trama así como los giros argumentales a los que nos expone, Entre los muertos me ha parecido el más flojo de los tres y con unas dosis de surrealismo que no hay ni por donde cogerlo. Especialmente el final, que aunque sí lo he visto venir me he quedado ojiplática con los argumentos que esclarecen lo que le pasó a Kerman. Perdona pero no hay por donde cogerlo, quienes hayan leído Entre los muertos sabrán a lo que me estoy refiriendo.

Por lo demás es un libro que se lee bien, que engancha y que te mantiene entretenido durante unos días aunque si tuviera que evaluar la trilogía en su conjunto diría que va de más a menos, si se lee en el orden establecido, siendo El mentiroso el mejor de los tres libros pero, al ser cada uno una historia independiente, se pueden leer en el orden que se quiera y ver qué relación se estable entre los tres o qué personajes comparten.
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