El saqueo de Roma

Antes de devorar "El saqueo de Roma" se recomienda leer "Godos" del mismo autor.
Y digo, bien, devorar, es la novela quien te lee a ti, las páginas pasan solas y el lector se convertirá en un personaje más.
Tensión narrativa a la altura de Posteguillo, aunque la prosa de Pedro Santamaría está a años luz, estructura y argumento se precipitan en una montaña Rusa sin apenas rectas.
Puro vértigo.
Y del bueno.
Sus pequeñas repeticiones en pocos párrafos son cuestiones de editorial, que para nada modifican el pulso que el autor le da a su obra.
El título no da lugar a dudas. Mucho se ha escrito acerca de este episodio fundamental para el devenir de la historia y el gran imperio romano...sus últimos estertores.
Pero Santamaría rompe con el vicio histórico de demonizar al pueblo godo, bárbaros si, salvajes, también y lo que todos omiten, nobles, leales y generosos guerreros.
Un pueblo nómada, en busca de un lugar donde vivir, alimentados con trigo y traicion.
¡Pan y tortas!
Un imperio dividido, oriente y occidente cada uno con su emperador.
Hermanos, ineptos, frágiles, futiles y rodeados cada cual por una corte que explota sus defectos en favor de su personal ambición.
Y el senado más inepto de la antigua Roma como guinda del pastel.
Mentiras, envidias,"malas digestiones", política, ambición, espadazos y hambre...demasiada hambre, el arma más cruel de la humanidad.
La novela cuenta con una batería de personajes muy bien trazados, todos tienen sombras, todos las manos ensangrentadas, pocos honor.
Novela histórica de manual, de capítulos cortos, frases directas, argumento sólido, que no te da un respiro, si vas flojillo mejor ponte un pañal.
Tenemos nueva estrella y se llama...
Pedro santamaria.
Segunda entrega de una trilogía que no deberías perderte.

Intrigas políticas, amor y guerra…
Año 394 d.C.
Los godos han vuelto a ser traicionados por Roma. Diez mil de sus mejores guerreros yacen muertos a orillas del Frígido. Alarico, el joven caudillo, que toma el testigo de aquellos que le precedieron, intentará reconducir un pueblo errante condenado a diluirse en la historia.
El emperador Teodosio envía a Alarico y su ejercito de godos a una cruenta batalla sabedor de que ninguno de ellos saldrá con vida. Teodosio se garantiza de esta manera ser el ganador y alzarse victorioso ante la exigente Roma y ya de paso cercenar el ejercito godo que, aunque aliados de roma suponen un estorbo para él.
Diezmado el ejercito godo, Alarico partirá y comenzará a preparar su venganza contra el imperio.
La muerte precipitada de Teodosio impula las conjuras palaciegas. Estilicón mano derecha del emperador y custodio de Arcadio y Honorio los jóvenes hijos del emperador llamados a ser los sucesores de su padre, será junto su mujer Serena los que ostenten el poder del gran imperio.
Luchas políticas, conjuras, batallas sangrientas… Roma es poderosa, pero Alarico va tras ella.
El poder de un gran Imperio
El saqueo de Roma, producido el 24 de agosto de 410, fue la culminación de 15 años de rebeldía goda, que Roma no había sabido contener. Tres lustros en los que, liderados por Alarico, aquellos hombres habían llevado su amenaza primero a Constantinopla, luego a Atenas, más tarde a Milán y finalmente a la capital del imperio. Alarico, que en los últimos tiempos se había enfrentado al malestar de los suyos por su empeño en seguir negociando, se dejó llevar por la furia y se decidió a arrasar Roma. Eran los últimos días de agosto cuando el ejército godo volvió a presentarse ante las murallas romanas con la intención, esta vez sí, de asestarle un golpe mortal.
Mi opinión:
Pedro Santamaría nos sumerge de lleno en las batallas por controlar el poder del gran Imperio Romano. Con un ritmo ágil y lenguaje sencillo El saqueo de Roma nos muestra a la perfección las intrigas, las envidias y las traiciones que había en torno a alcanzar el poder absoluto del imperio. Alarico segundo rey godo, es el encargado de llevar a cabo esa venganza contra la gran Roma por las traiciones cometidas hacia su pueblo.
Con personajes tan relevantes como: Serena la mujer de Estilicón, ávida de poder, Eudoxia que para mi sin duda es la que gobernaba y no su marido Arcadio y por último Gala, gran protagonista en la última mitad del libro. Tres grandes mujeres que tras las sombras manejaban el imperio.
Un libro donde batallas son vividas casi en primera persona pero que ha sesgado la vida de personajes muy relevantes durante toda la historia en apenas dos párrafos. Unos personajes cruciales, dotados de una personalidad propia y que no se merecían acabar con finales tan repentinos.
En conclusión, un libro donde comenzamos a ver el preludio de la caída del Imperio Romano, siendo la primera vez que Roma caía ante un enemigo.
Un libro recomendado a los amantes de la novela histórica en todo su esplendor.

Marco Aurelio

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Increíble. Una historia perfecta, fiel a la realidad y muy adictiva. Sin duda, una maravilla.
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