No sé ni por dónde empezar con esta reseña, la verdad. Aún estoy flipando con lo bien construido que está el libro desde el principio y sigo preguntándome por qué no hay una película de Elantris ya. Me alegro tantísimo de haber empezado a leer a Brandon Sanderson y es que ya tengo claro que voy a continuar con las otras novelas del Cosmere. Es increíble cómo escribe, a pesar de ser un libro de 800 páginas, no se hace nada pesado en ningún momento y eso me parece digno de admirar. Me encantan los personajes, desde la magnífica Sarene, que se niega a ser definida como dicta la sociedad, hasta Dilaf, pasando por el estupendo Raoden, el entrañable Galladon y los simpáticos Kiin, Lukel, Shuden y compañía. Elantris es ya uno de mis libros favoritos de fantasía y me ha abierto un mundo. Me da pena que, al ser un libro autoconclusivo de momento, no voy a poder seguir leyendo las aventuras de Sarene y Raoden. Ojalá que algún día Sanderson continúe esta historia. |